Víctor Hugo Prado
Nada debe preocupar más a los mexicanos que el evidente deterioro del régimen democrático en el país. El cacareado plan C que se veía lejano, ahora está cerca, muy cerca y con un poder destructivo del andamiaje institucional sin límites. En el fondo tiene que ver con el triunfo electoral logrado por Morena y sus aliados el PT y el Verde, tres fuerzas políticas a las que el pasado viernes 23 de agosto el INE les regaló una sobrerrepresentación que no se refleja en los votos, 374 diputados de 500, lo que representa el 74 por ciento, cuando en las urnas solo obtuvieron poco más del 52 por ciento.