Un
Momento Por Favor
J. Jesús Juárez Martín
Hay
celebraciones cívicas que mentalizan a ciertos objetivos sociales por una mejor
convivencia, tal es el caso del “Día del Niño”, porque es la oportunidad de
pensar que los niños son el futuro de nuestras familia, de la Patria, son la
esencia de la continuidad de la humanidad, de ahí la importancia de un
conocimiento esencial de lo que ellos representan por pequeños que nos
parezcan, bastarán unos pocos años para dejar de ser los niños que ahora son y
que adolescentes o jovencitos inician un rol social diferente ya de personas en
desarrollo y que pronto serán mayores de edad. y en su plenitud de vida se
incorporan a la vida cívica, laboral y social de su juventud o madurez; su
niñez es el tiempo privilegiado para su educación para que los vocacionemos a
una vida plena al servicio de la familia y social, los niños bien educados
serán en lo futuro la pléyade de ciudadanos que forjarán los grupos laborales
que necesita nuestra Patria, la humanidad, los deportistas que entusiasman a
las generaciones nuevas a ser los deportistas que luchan por una patria y
futuro mejor para la sociedad y la humanidad, en fin que los estímulos para su
reconocimiento como niños y festejos en su día sean motivo de la valoración de
su importancia como futuros ciudadanos, padres de familia, profesionistas,
obreros, gobernantes, docentes, en fin suplir la diversidad de ocupaciones que
actualmente tienen el cuidado de la producción, el orden, la productividad, el
transporte, hasta la seguridad de la propia Patria ante eventos fortuitos de desórdenes
sociales, en fin, el progreso fundamentado en la convivencia pacífica, respetuosa
del orden y de los derechos sociales.