Pedro
Vargas Avalos
Hay
fechas muy señaladas en los anales de los pueblos, las cuales quedan como
efemérides, ya de gratos recuerdos (como Navidad o el Grito de Independencia,
imborrables de la mente mexicana) o de infausta memoria, como la noche de San
Bartolomé y el martes negro de Nueva York: en la primer data, sucedió la
matanza de protestantes en Francia (24 de agosto de 1572) y en la segunda, fue
el célebre crack de la bolsa de valores neoyorkina, en octubre 24 de 1929, que
dio paso a la Gran Depresión, es decir, la crisis financiera que perjudicó al
orbe durante una década.