Juan
José Ríos Ríos
El
Volcán/Guzmán
Los
problemas sociales que se derivan con la participación de jóvenes y la
violencia que se vive en el país, requiere la participación de la Iglesia, de
todos los cristianos, pero, principalmente de las familias. “Necesitamos,
primero, repensar si nuestro trabajo está bien ubicado, si seguimos dando las
mismas respuestas a preguntas que ya no se hacen, nosotros mismos no vamos a
llevar ningún trabajo adelante, debemos hacer una seria reflexión del trabajo
que realizamos, no sólo con los jóvenes, sino con toda la tarea
evangelizadora”.