*José Filiberto Figueroa Cacho
Si hiciéramos una introspección como docentes con
respecto a nuestra labor y lo que le damos prioridad, llegaríamos al triste
escenario de que por cuestiones de presión laboral nos inclinamos a la parte
curricular y descuidamos el desarrollo de las habilidades del pensamiento.
Entendiéndose este concepto como la capacidad de un individuo para utilizar su pensamiento
y su razonamiento abstracto; cómo Vigotski diría la transición de un
pensamiento de bajo nivel a un pensamiento de orden superior.