Samuel Gómez Patiño
El 12 de junio de
1986, en medio del mundial de fútbol de México 86, me levante temprano y tome
mi acordeón, recuerdo haber tocado durante unas tres horas, casi hasta que me
dolió el hombro; cuando tenía alguna situación de estrés el acordeón ayudaba a
enfocarme otra vez y tranquilizarme. Ese día presentaba mi examen profesional,
recuerdo que a las seis de la tarde tenía que estar en la Sala Audiovisual de
la Facultad de Contaduría y Administración, en la Universidad Autónoma de Baja
California, en mi ciudad natal Tijuana.