La poetisa Alejandrina Hinojosa

Fernando G. Castolo

En 1974, el poeta sansebastianense Ramón Rojas Chávez, publicaba un ensayo con el que pretendió rescatar del olvido a la poetisa Alejandrina Hinojosa. Esta mujer de las letras sigue siendo un misterio, aunque Rojas Chávez entresaca, de no sé donde, algunas de sus creaciones cargadas de "exquisita sensibilidad", señala. Aunque don Ramón asegura que la poetisa es "zapotlense de nacimiento", la página familysearch ventila que llevó en vida el nombre de María Alejandrina Hinojosa Hinojosa, hija de don José Mateo Hinojosa Negrete y doña María Emilia Hinojosa Sáenz, nacida el 12 de febrero de 1915, según su registro de bautismo celebrado en Tuxpan, Jalisco. Para quienes reconocemos el espectro social regional, el apellido Hinojosa es abundante en aquella localidad, por lo que nos parece obvio que haya nacido allá. Rojas Chávez abunda que Alejandrina poseía un carácter que se forjó en el crisol del sufrimiento, según se desprende de su obra literaria. Dice que fue joven apasionada y madre sufrida y abnegada a toda prueba y, quizá, de ahí deriva su personalidad tan peculiar:

"... Habrá mayor ventura

que sentir otra alma, sedienta de la nuestra?"

Continúa don Ramón señalando que como mujer, era idealista y soñadora, y que le cantaba a la ilusión:

"Con tus divinas alas,

calentaré mi espíritu;

en tus divinos ojos,

reflejaré mi vida,

y cuando quieras amarme,

me entregaré dormida.

Los ángeles bajarán a cobijarme,

y cuando despierte sorprendida,

con agua de juventud bañaré mi carne

y con lágrimas de niño limpiaré mis ojos,

para que al mirarte,

se confundan los cielos y los mares,

y yo quede convertida en astro."

Por desgracia existe una casi nula información documental de la poetisa. Solamente destaca don Ramón que tuvo la fatal pérdida de "su pequeño hijito". Dice que publicó un libro bajo el título de "La vida", en el que ventila poesías que cuentan con la originalidad de quien no se fija métrica alguna; "son poesías producto del sentimiento de un alma noble y de una inspiración espontánea y fecunda, que da forma a cada uno de los momentos según su estado de ánimo...". Bien valdría la pena elaborar un profundo estudio sobre la vida y obra de la poetisa Alejandrina Hinojosa y, con ello, rescatar el olvido a una mujer de letras que sigue siendo un misterio, muy conmovedor por cierto, de nuestra literatura regional.

*Historiador e investigador.