Víctor Hugo Prado
Durante la pasada gestión del ejecutivo federal encabezada por López Obrador y en lo que va de ésta, se ha generado una tendencia hacia la centralización del poder en México. La reciente aprobación en el pleno de la Cámara de Diputados de la reforma constitucional para eliminar organismos autónomos, representa una amenaza directa a los derechos ciudadanos y a la transparencia en la gestión de recursos públicos. Sin instituciones independientes que emitan resoluciones técnicas y transparentes, la ciudadanía corre el riesgo de enfrentar retrocesos en el ejercicio de los más variados derechos, entre ellos, el tener una educación de calidad, por lo que hoy me referiré al caso MEJOREDU.
MEJOREDU es la Comisión Nacional para la Mejora Continua de la Educación, que tiene como misión, “impulsar la mejora continua de la educación básica, media superior, inclusiva y de adultos para contribuir al desarrollo integral de las niñas, niños, adolescentes, jóvenes y adultos en sus diversos contextos sociales con un enfoque de inclusión, equidad y excelencia”. Desde su creación, la institución ha sido reconocida por sus aportaciones en materia de mejora continua, orientadas a la consolidación de comunidades escolares como espacios formativos inclusivos, interculturales y de excelencia tanto en la educación básica y media superior en México.
Este organismo público descentralizado, no sectorizado, con autonomía técnica, operativa, presupuestaria, de decisión y de gestión, con personalidad jurídica y patrimonio propio, fue creado el 15 de mayo de 2019, en términos de los artículos 3°, de nuestra Constitución.
Entre sus funciones se encuentran: realizar estudios, investigaciones especializadas y evaluaciones diagnósticas, formativas e integrales del Sistema Educativo Nacional; determinar indicadores de resultados de la mejora continua de la educación; establecer los criterios que deben cumplir las instancias evaluadoras para los procesos valorativos, cualitativos, continuos y formativos de la mejora continua de la educación; emitir lineamientos para el desarrollo del magisterio, desempeño escolar, entre otras.
En su página se albergan una importante cantidad de investigaciones y estudios con los que se da cuenta de sus contribuciones a la mejora educativa. Sin embargo, le llegó la hora, desechándolo en una sesión en la que no hubo argumentos académicos de quienes votaron a favor, solo la austeridad republicana, sin medir los costos que la medida traerá para el sistema educativo nacional.
Extinguir a MEJOREDU y pretender transferir sus funciones a la administración pública federal deja abierta la puerta a la autocomplacencia, a la ineficiencia, a la opacidad y la corrupción, además de propiciar una concentración de poder que favorece prácticas no deseables en la educación, incrementando riesgos de tener una educación encerrada en su propio sistema, sin ojos externos que orienten las buenas prácticas en la educación básica y media superior.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario