Fernando
G. Castolo
La
iniciativa de confirmar una "Guardia de Honor" de Señor San José y la
Virgen del Rosario fue del esposo de la mayordoma de las solemnidades josefinas
de 1957, año en que fueron coronadas las imágenes. La mayordomía estaba
encabezada por doña Estela Sánchez Navarro. Su esposo, Antonio Arias Pedroza,
que ya había sido mayordomo igualmente en el año de 1953 (alentando en ese año
la construcción de las torres de la entonces parroquia), apoyó sobremanera y
alentó la gracia de la Coronación del santo patrono de Zapotlán por orden del
Papa Pío Duodécimo.
La feliz noticia se recibió en la residencia
de la familia Arias-Sánchez (en la Ciudad de México) a través de un telegrama
remitido por el arzobispo José Garibi Rivera, desde Guadalajara, a las 12:40
horas, del 27 de marzo de 1957, en el que indica "con profunda
satisfacción comunícole fue concedida coronación pontificia Sr. San
José...".
A
partir de ese momento se iniciaron intensos trabajos y se organizaron las
diversas comisiones para cubrir todas las necesidades del solemne acto de la
Coronación. Entre estas comisiones destacó una: la relativa a conformar una
"Guardia de Honor", tal y como la tenían las figuras de la realeza en
las naciones europeas de la época. El encargado de conformar la "Guardia
de Honor" de Señor San José y la Virgen del Rosario fue el magnate don
Guillermo Ochoa Mendoza (eterno Presidente de la Cámara de Comercio local).
Para la "Guardia de Honor" de Señor San José se convocó a: Juan de la
Torre; Luis Arias Pedroza; Alfonso Villanueva Arias; Gilberto del Toro; José
Noriega; Alfredo Villanueva Preciado; Alfredo del Toro; Luciano García; y José
Guadalupe Ávalos; a quienes se les solicitó que se presentaran con riguroso
traje negro y corbata gris portando, además, la medalla conmemorativa de la
Coronación. Por otra parte, para la "Guardia de Honor" de la Virgen
del Rosario, se convocó a las siguientes damas: Bertha Alicia del Toro Enríquez;
Olivia Díaz Velasco; Olga Urzúa; Rosa del Toro; e Hilda Díaz Velasco; así como
las Hijas del Sr. Toledo; las Hijas del Sr. Marcos Ramírez; las Hijas del Sr.
Ramón Soltero; y las Hijas del Sr. Luis Morales Orozco. Ellas fueron exhortadas
para que lucieran vestidos en tono rosa, cubiertas de la cabeza con mantilla
blanca portando, igualmente, la medalla conmemorativa de la Coronación. Todo
esto según se consigna en los archivos particulares de don Antonio Arias
Pedroza.
II
Entre
otras de las muy especiales Comisiones conformadas para la magna ceremonia de
Coronación, con corona de oro, de la taumaturga imagen Josefina, fue la de
designar a los caballeros, damas y niños que cargarían las respectivas coronas
para ceñir las sienes de la Sagrada Familia. En las maquetas, diseñadas
previamente por don Antonio Arias Pedroza, se observan los siguientes apuntes:
para cargar la base de madera en donde, sobre cojín de raso, iba la corona del
Niño Jesús se designó a los niños: Eduardo Arias (quien, al final, fue el que llevó
el Breve Pontificio, sobre charola de plata); Luis Ramos; Salvador Solórzano;
Sergio Vargas; Bernardo Arias; José Antonio Arias; Alberto Fernández; Carlos
Fernández; el hijo del Tlayacanque; el hijo de Magdaleno del Toro; el hijo de
Ramón Soltero; y el hijo del Sr. López.
Todos
ellos vestirían de azul y blanco. Para la base de madera donde, sobre cojín de
raso, iba la corona de la Virgen del Rosario, se invitó a las siguientes
señoritas: María Antonieta Arias; Rosa del Toro Yáñez; María Antonieta Cardona
Arias; Hilda Díaz Velasco; Socorro Ojeda y Socorro Arias. También se invitó a
distinguidas señoras: María Yáñez de Del Toro; Consuelo R. viuda de Villanueva;
Angelina Andrade viuda de Hernández Rivera; Teresa Arias de Cardona; María de
Jesús Mendoza de Sánchez; Elena Aldrete de Fernández; y Josefina González. Las
señoritas irían vestidas en tono rosa con mantilla blanca y guantes blancos;
mientras que las señoras irían en negro con mantilla negra. Finalmente, para la
base de madera en que, sobre cojín de raso, iba la corona de Señor San José, se
invitó a los siguientes caballeros: Porfirio Ramos, José Antonio Arias,
Hermenegildo Larios; Salvador Aguilar Vázquez; Ricardo del Toro; Evaristo
Sánchez; Miguel Fernández; Roberto Aguilar Vázquez; Basilio Cardona Machuca;
Ricardo Corona; y Rodolfo Vergara. Todos ellos vestirían de jaquet: saco negro
con cola, pantalón rayado y chaleco blanco. Todo ello lo dejó anotado en propio
Antonio Arias Pedroza.
III
El
medio periodístico "Vigía" da informes sobre las personas que tomarán
parte directa en la Coronación. Como Padrinos de la Corona de Señor San José se
invitó a los señores: don Ricardo del Toro, don Evaristo Sánchez, Lic. Basilio
Cardona y don Miguel Fernández. Mientras que como Madrinas de la Corona de la
Virgen del Rosario se invitó a las siguientes señoras: doña Elena Aldrete de
Fernández, doña María Yáñez de Del Toro, doña Consuelo Rodríguez viuda de
Villanueva, doña Teresa Arias de Cardona y doña María de Jesús Mendoza de
Sánchez.
Y, finalmente, como Padrinos de la Corona del
Niño Jesús los siguientes niños: José de Jesús del Toro Sánchez, Carlos
Fernández Aldrete, Juan José López Ramírez y José Antonio Arias Sánchez. Como
Postuladores (solicitantes) de la Coronación conformaron el listado las
siguientes personalidades: Canónigo Benjamín Ruelas, Canónigo Librado Padilla,
Canónigo Luis Radillo, Sr. Cura Adolfo Hernández, y los señores: don Porfirio
Ramos, Lic. Basilio Cardona, Dr. Jorge Ramiro Aguilar, don Miguel Fernández,
don Albino Mendoza, don Salvador Guzmán; y los mayordomos: doña Estela Sánchez
Navarro y don Antonio Arias Pedroza.
Cabe
acotar que los participantes, en su mayoría, fueron mayordomos o familiares
directos de mayordomos de la misma solemnidad en otros años, quienes tenían un
reconocido prestigio moral de acendrado catolicismo dentro de la feligresía
local y, por lo mismo, fue bien visto por la comunidad en general su
participación.
IV
Un
recuerdo imborrable, sin duda alguna, es el que el pueblo de Zapotlán tiene. Al
ver las coronas de oro ciñendo las sienes de las Sagradas Imágenes,
inmediatamente nos viene el recuerdo del acontecimiento de la Coronación
Pontificia verificado el 22 de octubre de 1957.
Para
su hechura fue necesario comprar cinco kilos de oro fino de ley de 999.8
milésimos en lámina, a la Institución Financiera y Fiduciaria "Crédito
Minero y Mercantil, S. A.", cuyo costo ascendió a 60 mil pesos "de
aquellos". A la misma Institución se le compraron dos kilos de plata fina
de ley de 999 milésimos en granilla, que tuvo un costo total de 543.50 pesos.
Ese
material, comprado entre abril y mayo de 1957, se le entregó al orfebre José
Ledezma para que realizara lo siguiente, según contrato: una corona de 3 kilos
de oro de 18 kilates; una corona de 3 kilos de oro de 18 kilates; y una corona
de 1 1/2 kilos de oro de 18 kilates. Todo lo cual tuvo un costo, por mano de
obra, de 40 mil pesos. Adicionalmente fue hecha una vara de azucenas de plata
la que tuvo un costo de 3 mil pesos. Las coronas y la vara de azucenas fueron
entregadas el 4 de septiembre de 1957 a los mayordomos. Adicionalmente se
compró un kilo más de oro fino de ley (en 14 mil pesos), así como un kilo más
de plata fina de ley (en 269.50 pesos), para la hechura de las medallas
conmemorativas.
Se
manufacturaron 20 mil medallas en plata oxidada, 501 medallas de plata Sterling
y 220 medallas de oro de 12 kilates. Los precios en que se ofertaron estas
medallas al público fueron: de plata oxidada, con cadena, en 13 pesos; de plata
Sterling, con cadena, en 90 pesos; y de oro de 12 kilates en 500 pesos. Nunca,
en la historia de las fiestas josefinas, hubo un desprendimiento tan
significativo en cuanto al costo que representó su organización. ¡Sea por Dios!
V
Existe
un programa impreso en el que se dan pormenores sobre las peregrinaciones
exhortadas por el Cardenal José Garibi para que las parroquias del Arzobispado
de Guadalajara rindan sus homenajes a Señor San José, durante el mes de octubre
de 1957.
El
día 1, las parroquias de El Sagrario Metropolitano de Guadalajara, de Ameca, de
Tala, de San Martín Hidalgo, de Ahualulco, de San Marcos y de Teuchitlán. El
día 2, las parroquias de La Concepción de Guadalajara, de Atotonilco el Alto,
de San Francisco de Asís, de Ayo el Chico, de Degollado y de San José de
Gracia. El día 3, las parroquias de San José de Analco de Guadalajara, de
Arandas, de Jesús, María y José, de San Ignacio Cerro Gordo, de San Julián y de
Santa María de la Paz. El día 4, las parroquias de Nuestra Señora de Lourdes de
Guadalajara, de Jalostotitlán, de Valle de Guadalupe, de Cañadas y de San
Gaspar de los Reyes.
El
día 5, las parroquias De la Luz de Guadalajara, de San Juan Bautista del Teúl,
de Florencia, de Mezquital del Oro y de La Estanzuela. El día 6, las parroquias
del Santuario de Guadalupe de Guadalajara, de Chapala, de Jocotepec, de Tizapán
el Alto y de Juanacatlán.
El
día 7, las parroquias De Jesús de Guadalajara, de Ocotlán, de Poncitlán, de
Zapotlán del Rey y de Tototlán. El día 8, las parroquias de Mexicaltzingo de
Guadalajara, de Mazamitla, de San Juan de la Montaña, de Quitupan, de Cocula y
de Villa Corona. El día 9, las parroquias de San Andrés Tlaquepaque de
Guadalajara, de San Pedro Tlaquepaque, de Tonalá y de Toluquilla.
El
día 10, las parroquias de La Sagrada Familia de Guadalajara, de Sayula, de San
Gabriel, de Amacueca, de Tapalpa, de Tenamaxtlán, de Ayutla y de Unión de Tula.
Y el día 11, las parroquias de San Antonio de Guadalajara, de Tepatitlán, de
Pegueros, de Capilla de Guadalupe y de Acatic.
La
relación de las peregrinaciones que fueron programadas previas al gran
ceremonial de coronación de Señor San José continúa: día 12, parroquias de San
Carlos de Guadalajara, de Juchipila, de Moyahua, de Apozol, de Nochistlán, de
Mexticacán y de San Pedro Apulco. Día 13, las parroquias de San Felipe de Jesús
de Guadalajara, de San Juan de los Lagos, de San Miguel el Alto y de San
Sebastián Mártir. Día 14, las parroquias de San Juan de Dios de Guadalajara, de
Cuquío, de Ixtlahuacán del Río, de Yahualica y de Manalisco. Día 15, las
parroquias de San Martín de Guadalajara, de La Barca, de Portezuelo y de Jamay.
Día 16, las parroquias de San Miguel del Espíritu Santo de Guadalajara, de
Bolaños, de Chimaltitlán, de San Martín de Bolaños, de La Yesca, de Amatlán de
Jora, de Hostotipaquillo y de San Pedro Analco. Día 17, las parroquias de San
Vicente de Guadalajara, de Tequila, de Amatitán, de El Salvador, de Magdalena,
de Tecolotlán, de Juchitlán, de Amatlán de Cañas, de Etzatlán y de El Rosario
(Nayarit). Día 18, las parroquias de Santa Teresita de Guadalajara, de
Tlajomulco, de Santa Ana Acatlán, de Zacoalco, de Atemajac de Brizuela, de
Techaluta y de Santa Anita. Día 19, las parroquias de San Juan Bosco de
Guadalajara, de Teocuitatlán, de Concepción de Buenos Aires, de Atoyac, de
Totatiche y de Salitre de Guadalupe. Día 20, las parroquias de La Santísima
Trinidad de Guadalajara, de Zapopan, de Tesistán, de San Cristóbal de la
Barranca, de Zapotlanejo, de El Triunfo y de Puente Grande. Y, finalmente, el
día 21, las parroquias de Nuestra Señora de la Paz de Guadalajara, de Lagos de
Moreno, de San Miguel de Cuarenta, de San Diego de Alejandría, de Unión de San
Antonio, de Jalpan de Cánovas (Guanajuato) y de Tlacuitapan.
Las
peregrinaciones deberían de ingresar a la Parroquia de Zapotlán el Grande a las
11:00 horas. Avisan a los feligreses foráneos que de Guadalajara a Ciudad
Guzmán el tiempo de viaje es de 3 y media horas, y que hasta Zacoalco hay
carretera asfaltada y el resto es terracería.
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