Salvador Mateo
Aparte del enorme
retroceso en materia educativa por la implementación de la llamada
nueva escuela mexicana y la distribución de los libros de texto
gratuito elaborados bajo el modus operandi del gobierno
lopezobradorista, cuyo contenido mantiene en la incertidumbre a
docentes y padres de familia pues reflejan falta de técnica,
profesionalismo y la ausencia de una base científica; hay otro golpe
a la educación y a los bolsillos de los mexicanos del que no hablan
lópez obrador ni morena. El encarecimiento de los gastos por regreso
a clases del Ciclo Escolar 2023-2024 que provocará un incremento de
la deserción escolar.
El pasado 24 de julio la
Secretaría de Educación Pública (SEP) publicó la lista de
materiales y útiles escolares para cada nivel o grado escolar para
que los estudiantes de preescolar, primaria y secundaria puedan
realizar actividades desde el primer día de clases del próximo
ciclo escolar. Además, el maestro de grupo podrá sugerir otros
materiales en función de las necesidades de sus alumnos y del
contexto en el que se ubica la escuela. La SEP aclara, en ningún
caso estos materiales serán costosos para la canasta familiar
básica.
Entre los diversos problemas por los cuales los
estudiantes se ven obligados a dejar sus estudios, el Fondo de las
Naciones Unidad para la Infancia (UNICEF por sus siglas en inglés)
destaca la falta de recursos económicos: por ejemplo en la educación
secundaria la causa principal de abandono escolar es el trabajo
infantil producto de los bajos recursos familiares y la necesidad de
aportar económicamente al hogar, lo que los obliga a trabajar y
dejar la escuela.
La deserción escolar en México es
grave. De acuerdo con cifras de la SEP, antes de la pandemia había
más de 4 millones de menores que no asistían a la escuela. Estas
cifras se actualizaron en 2022 y se elevaron, ya que en los primeros
dos años de pandemia la tasa de deserción escolar aumentó más de
3 puntos porcentuales en educación básica y 11.6 en media
superior.
En el país existen 7.5 millones de hogares que
no alcanzan a obtener los recursos suficientes para cubrir el costo
de la canasta básica de una persona como revela un análisis del
Observatorio Acción Ciudadana Frente a la Pobreza. Está claro, los
mexicanos que se encuentran en esta situación si no tienen para
comer, mucho menos para mandar a sus hijos a la escuela. De tal
manera que con el encarecimiento de gastos por regreso a clases
incrementará la deserción escolar.
En efecto, la
Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC) reveló que los
gastos para el regreso a clases correspondiente al Ciclo Escolar
2023-2024 por alumno ascenderán a 7,200 pesos, es decir, un 30 por
ciento más que en 2022, un gasto que considera compra de útiles
escolares, mochila, zapatos, uniformes y cuotas “voluntarias”.
La
ANPEC en cuanto a la lista de útiles escolares detalló que esta
tendrá un costo promedio de al menos 1,600 pesos, mientras que por
los zapatos y tenis serán 1,200 pesos, por uniformes 1,900 y mochila
500 pesos, que resulta en 5,200 pesos, pero a eso hay que sumarle
aportaciones voluntarias y otros gastos agregados por cada escuela
que llegan a implicar al menos 2,000 pesos más.
Encontrar
solución a este lamentable panorama no es fácil. En nuestro país,
no gobierna una nueva clase social, sino una mezcla confusa y
heterogénea de comunistas, excomunistas, socialdemócratas,
izquierdistas teñidos de progresismo, tránsfugas y trepadores
profesionales de los viejos partidos como el PRI incluso del PAN que
perdieron el poder y uno que otro ricacho que aprovecha el poder de
Morena para proteger y acrecentar sus negocios, quienes solo están
jugando a la revolución “comunista” y con eso están provocando
que más mexicanos caigan en pobreza y pobreza extrema.
Analistas
serios afirman, aunque suene terrible lo que busca López Obrador es
mantener bajo el yugo de la ignorancia a los mexicanos y a las nuevas
generaciones, condenarlas a mantenerse en la pobreza y la
marginación. AMLO concibe al México del futuro, conformado por
sectores de la población sujetos a los programas de política
asistencial electoral que está otorgando su gobierno.
Contrario
a las explicaciones del presidente de que para su administración la
educación, la salud, no se trata de una mercancía, sino que se
tratan de un derecho para la sociedad y durante sus conferencias
matutinas presuma de que alrededor del 75 por ciento de las escuelas
públicas del país han recibido su presupuesto destinado al
mantenimiento de los planteles, lo cierto es que en los hechos tanto
la salud como la educación las está privatizando, dejando a los
mexicanos a sus suerte para que se curen y eduquen, si es que pueden
hacerlo.
Bajo este contexto, los mexicanos que enfrentan
todo tipo de carencias e injusticias, quienes en su mayoría son
precisamente los que producen la riqueza de este país, es decir, los
trabajadores deben informarse, estudiar para poder darse cuenta de la
necesidad imperante de cambiar el actual modelo económico por otro
nuevo mucho más justo, próspero y eficaz que garantice en primer
lugar empleos para todos los que puedan y quieran trabajar; que eleve
sustancialmente los salarios y sean suficientes para cubrir
necesidades básicas como alimentación, salud, vivienda y educación.
A esto los invita el Movimiento Antorchista Nacional.
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