Eduardo Campos Flores
En su
boletín Económico Mensual correspondiente al mes de marzo del presente año, el
Instituto de Información Estadística Informática y Geográfica de Jalisco (IIEG)
reveló que el municipio de Zapotlán el Grande (antes Ciudad Guzmán) fue el que
mayor pérdida de empleos formales tuvo en el mes de febrero de 2023 con menos
604 trabajadores, le siguen, Chapala con menos 583 y Ahualulco de Mercado con
menos 165 empleos formales menos.
El IIEG
informa que dentro de los municipios con mayor pérdida absoluta de empleo en el
mes, Zapotlán el Grande tuvo 89 empleos permanentes más, pero perdió 693
empleos eventuales, mientras que, Chapala registró menos 549 trabajadores
permanentes y menos 34 eventuales. Por su parte, Ahualulco de Mercado tuvo
menos 41 empleos permanentes y menos 124 empleos eventuales. Como se ve, estos
datos no son escandalosos, y pudieran pasar desapercibidos, pero como se sabe
los datos oficiales no son exactos, por lo que las cifras extraoficiales pueden
ser más altas.
No
obstante, para analizar un poco más de cerca la situación conviene revisar
otros informes publicados por el organismo dependiente del Inegi, el que a
través de sus fichas informativas en agosto de 2022 dio a conocer que entre las
demarcaciones que presentaron pérdidas de empleos formales, en primer lugar se
encuentra el municipio de Tamazula de Gordiano que tuvo en el mes una reducción
de 819 puestos de trabajo, le sigue, Tlaquepaque con la pérdida de 815 y el
tercer municipio fue Zapotlán el Grande con una disminución de 777 empleos
formales.
Asimismo,
de acuerdo con datos publicados por el IIEG que se obtuvieron a través de los
reportes que reciben del IMSS, durante los meses de marzo, abril, mayo y junio
de 2020, es decir desde que fue declarada la pandemia por Covid-19, Zapotlán el
Grande perdió 3 mil 83 empleos formales, con estas cifras el municipio se
colocó como uno de los principales municipios a nivel estatal con mayor pérdida
de empleo formal.
Además
de los más de 3 mil zapotlenses que por la pandemia se quedaron sin ingresos y
sin su seguro médico, el IIEG registró que otros municipios de la región sur de
Jalisco que aparecen en la lista de los 20 municipios con mayor pérdida de
empleos formales, se encuentran Zapotiltic que durante los referidos 4 meses
perdió mil 118 empleos formales, San Gabriel con 585, Tuxpan con 499 y Tamazula
de Gordiano.
Considero
que es importante poner atención a estos datos estadísticos, pues cuando menos
los municipios de Zapotlán el Grande y Chapala, hace pocos años se
caracterizaban por combinar su tranquilidad con un cierto auge económico. Por
ejemplo Ciudad Guzmán estaba considerado dentro de las seis ciudades medias que
desarrollan actividades locales que les permitían tener ingresos propios, el
70.5 por ciento de su población dependía de su propia actividad, lo cual
implicaba que había cierta certeza laboral gracias a su auge económico.
Ahora
al igual que en el resto del estado y el país, en varios municipios hay pérdida
de empleo formal. Pero el panorama laboral no parece mejorar en el corto tiempo
debido a la desastrosa situación económica que está viviendo nuestro país.
Durante
la pandemia fue casi completa la pérdida de empleos formales, además el
gobierno federal que es el principal responsable de generar condiciones para la
generación de más y mejores empleos, solo se ha abocado a tratar de recuperar
el empleo formal, pero ni siquiera eso ha logrado, se está viendo que es todo
lo contrario, con lo cual es evidente que los municipios con pérdida de empleo
formal es resultado del desastre económico de Morena.
Estamos
a casi año y medio de que concluya la actual administración federal y es
momento de que los mexicanos nos demos cuenta de su pésimo desempeño. Recodemos
que el presidente López Obrador, en sus discursos repite, una y otra vez, que
su gobierno no es igual que los del periodo neoliberal que solo buscaban el
crecimiento, y argumenta que no es fundamental crecer, que al fin y al cabo hay
desarrollo, pero esto es un absurdo. Porque desarrollo implica una distribución
más equitativa y una mejora en el bienestar social en general como empleos con
seguridad social, salud para todos, educación, vivienda, electrificación,
drenaje y otros servicios públicos, pero precisamente con la “pobreza
franciscana” ideada por AMLO está impidiendo la dotación de obras de
infraestructura social.
De tal
manera si con el neoliberalismo había crecimiento sin desarrollo, con la 4T y
Morena estamos viendo que no hay ni crecimiento ni desarrollo, es decir vamos
para atrás. Sin embargo, todos están coincidiendo en que no ofrecen mejoría en
el bienestar para el grueso de los mexicanos. Por lo que nos debe quedar claro
que urge un nuevo modelo económico que garantice empleos dignos para todos los
que puedan y quieran trabajar, que sea eficientemente productivo y distribuya
la riqueza en forma justa y equitativa. Este es el reto.
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