Desabasto en el IMSS

 

Juan José Ríos Ríos
El Volcán/Guzmán

 

 

Derechohabientes del IMSS e Ciudad Guzmán sufren afectaciones en su salud y economía al no poder surtir de los medicamentos prescritos por su médico familiar, “porque no nos surten de Guadalajara”, dicen los encargados de entregar lo que le indicaron en sus recetas a los pacientes que se presentan a la farmacia de la institución, situación que se viene padeciendo desde el pasado mes de enero, razón por la cual las personas que se encuentran en estas circunstancias tienen que hacer erogaciones económicas para comprarla en las farmacias privadas, o bien, esperar y no cumplir con sus medicaciones para preservar o mejorar su salud en tiempo y forma.

            Esta carencia de medicamentos, principalmente y más recurrente la propafenona y el telmisartan, que se prescriben para los pacientes que sufren problemas de alta presión, es decir, deficiencias cardíacas, al igual que el sucralfatoy la neomicina, polimixina B, fluocinolona y lidocaína solución ótica, ésta último también desde enero pasado no más “no llega”. Lo malo que algunos de estos medicamentos que se sugiere comprarlos en las farmacias privadas, además del costo, no tienen completos los elementos que la medicina del IMSS que se prescribe, por lo que los pacientes además de hacer un gasto extra, no soluciona su problema de salud.

            No se conocen las causas por las cuales se origina el desabasto de medicamentos en el IMSS y, según el dicho de los encargados de la farmacia de esta institución de no recibir el surtido desde Guadalajara, pues no resuelve el problema de los pacientes, tampoco se sabe y se entiende el por qué no hay interés por resolver el problema, pues el seguro social debe de contar con algún director o delegado de la dependencia en esta ciudad o en la capital del estado para que se preocupara por el problema, estado que guarda la institución porque a lo  mejor no fluye la información, la comunicación entre jefes y empleados.

            A nivel federal se ha dicho en múltiples ocasiones que las instituciones de salud pública del nivel federal, además de resolver añejos problemas por la falta de médicos especialistas o personal de enfermería, se destinan los recursos financieros públicos suficientes para no solamente abastecer la demanda y necesidad de medicamentos, además de que éstos sean de calidad que antaño no tenían, sin embargo, y por lo que se padece en la Clínica Hospital de Zona número 9 del IMSS de Ciudad Guzmán, pese a tener esa calidad, deja mucho que desear en cuanto al abasto de las medicinas.