Fernando G. Castolo*
Un
importante literato de la primera mitad del siglo XX en Zapotlán, sin duda
alguna, lo fue Franco Beas, personaje que participó activamente en la vida
cultural de la ciudad y cuyas composiciones le valieron el reconocimiento del
breve círculo de intelectuales de la localidad, donde coincidían escritores de
la talla de Federico Lizarde Vargas, Fernando Chávez Fieldens, Alfredo Velasco
Cisneros, María Cristina Pérez Vizcaíno, Federico Vergara Mendoza y José Manuel
Ponce Segura, entre otros, quienes, para noviembre de 1932, se conformarían en
el primer grupo cultural de Ciudad Guzmán, denominado "Cervantes
Saavedra" (antecedente del "Arquitrabe", fundado doce años después),
a convocatoria del médico masón Roberto Lemus Ochoa.
Franco
Beas, cuyo nombre en realidad era Francisco Beas Ortega, nacido el 8 de
noviembre de 1881 en Ameca, Jalisco, hijo del matrimonio formado por los
señores Manuel de Beas y Rubio y María Rita de Ortega-Solórzano y
Lomelín-Lozano, llegó a la antigua Zapotlán atraído por la presencia de su
hermano el abogado Pedro Beas; ambos eran funcionarios del gobierno federal.
Franco Beas casó en esta población con la señorita María Palomino Vázquez el 8 de
mayo de 1912.
Durante
su estancia en Ciudad Guzmán llevó una vida muy activa dentro del campo
literario. En las páginas del medio periodístico "Plus Ultra" que
circuló por los años treinta del pasado siglo, muchas de sus creaciones se
reproducen dentro de la sección "La Lira Guzmanense".
Su
nombre saltó a la fama y el reconocimiento del medio cultural de la ciudad
cuando se hizo acreedor al primer lugar del Primer Certamen Literario convocado
por el propio citado medio periodístico a mediados de 1932, por su trabajo
poético "El Epinicio del Águila".
Franco Beas es un referente obligado en la
historia de las letras zapotlenses y bien valdría la pena rescatarlo de las
entrañas del olvido y trabajar un libro que reúna sus importantes aportaciones
a la literatura local.
*Historiador
e investigador.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario