La guía de vagos para salvar al planeta

  

Víctor Hugo Prado

 

 

Los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) 2015-2030 de las Naciones Unidas se han convertido en un referente mundial de lo que deben hacer las naciones para poner fin a la pobreza, que no haya sociedades con hambre, personas saludables, educación de calidad, igualdad de géneros, agua suficiente y limpia, energía asequible y no contaminante, trabajo decente y crecimiento económico, reducir desigualdades, ciudades y comunidades sostenibles, producción y consumo responsable, acciones por el clima, paz, justicia e instituciones sólidas y alianzas.

Los objetivos mundiales son importantes, están diseñados para cambiar el mundo, con la condición necesaria de la cooperación entre los gobiernos, las organizaciones internacionales y los líderes mundiales, pero también de los individuos de a pie como usted y yo estimado lector, pues al final de cuentas debemos reconocer que los cambios empiezan en uno mismo y en cada uno de los seres humanos del mundo.

En la página de los ODS  https://www.un.org/sustainabledevelopment/es/takeaction/ se publica una guía de vagos para salvar al mundo, visítela y léala, en ella se proponen cuatro niveles de participación de los individuos, desde cuando estás en el sofá, en la casa, fuera de casa o en trabajo.  De tal manera que, hasta los más indiferentes y perezosos, forman parte de la solución. Se señala que, hay cosas facilísimas que podemos introducir en nuestra rutina y, si todos lo hacemos, lograremos grandes cambios. He aquí algunas recomendaciones de acción:

 

·        Deje de utilizar los estados de cuenta bancarios en papel y pague sus facturas en línea o a través del teléfono móvil.

·        Comparta, no se limite a hacer clic en “me gusta”. Si ve una publicación interesante en las redes sociales sobre los derechos de la mujer o el cambio climático, compártala para que las personas de su red también la vean.

·        Apague las luces. La televisión y la pantalla de la computadora ya emiten una luminosidad cómoda, así que apague las otras luces si no las necesita.

·        Investigue un poco por la red y compre solo en empresas que sepa que aplican prácticas sostenibles y no dañan el medio ambiente.

·        ¡Hable alto y claro! Pida a las autoridades nacionales y locales entre los que se incluye al municipio que participen en iniciativas que no dañen a personas ni al planeta.

 

A propósito de hacer algo, ¿por qué el gobierno municipal en alianza con las instituciones de educación, cámaras, empresas, asociaciones de todo tipo no ha impulsado una campaña para limpiar la ciudad del terrible polvo, saldo de lodazal llegado de la montaña el pasado 21 de octubre?  Si esperamos que se vaya solo, ahí se puede ir la vida.