Juan
José Ríos Ríos
Con
todo respeto, pero en Ciudad Guzmán nada se hace a medias tintas, todo es a lo
grande, hasta los baches en las calles, no hay uno sobre otro porque la física
no lo permite, pero día con día el estado que guardan cada vez es peor, lo que
se agrava con el temporal de lluvias, el tránsito de vehículos de gran tamaño y
peso que ingresan a la zona urbana y, sobre todo, que no se hizo un trabajo
previo de mantenimiento, se dejó crecer el problema.
Pero no solamente hay baches en
calles asfaltadas o con concreto hidráulico, las empedradas están igual o con
mayores afectaciones, ya no se diga el ingreso o circuito oriente, casi desde
el monumento a la Solidaridad y hasta su entronque con lo que se conoció como Avenida
San Bartolo, no entendemos por qué tanta pasividad de la administración
municipal para dedicar recursos públicos y gente para que haga las
reparaciones, cuando en Ciudad Guzmán hay muy buenos empedradores de calles, se
dice que calles de la ciudad de Colima fueron empedradas por éstos.
Esporádicamente se hacen
reparaciones, pero generalmente se hacen a medias, por lo que lo hecho poco
dura y más si la mezcla que se hace con asfalto se deja a que el paso de los
vehículos la apisone, en vez de que las cuadrillas que hacen estas maniobras
fueran reforzados con el apoyo de una
aplanadora, por eso son esfuerzos y recursos mal empleados, no dan el resultado
que se requiere, les ganan las corrientes de agua que producen las lluvias, que
han sido abundantes este temporal, pero lo que más afecta a la administración
municipal es su pasividad y el ceremonial con que hacen sus actos, en el
palacio municipal, no volteando a ver el estado que guardan las calles de la
ciudad a la que se deben.
De qué sirve tener tantas
coordinaciones generales, una administración obesa, pagada con muy buenos
salarios y con una serie de prestaciones que nadie, en la iniciativa privada,
otorga, es una crítica sana, que tiende a intentar que los funcionarios
públicos reacciones, pero contra quienes les hacemos ver que están fallando,
parece que no se dan cuenta o no quieren oír el reclamo de los ciudadanos a los
que deben servir, fueron designados para cargos públicos por voluntad popular,
quien tiene la mayoría en el gobierno municipal, y la cabeza de éste nombrando
o designando sus colaboradores, están fallando, si no pueden, pues que dejen el
cargo o que sean retirados para que su lugar sea ocupado por gente más
responsable, más activa.
Si con recursos propios la
administración municipal no puede resolver los problemas de la ciudad, ya no
decimos de todo el territorio del municipio, comprendiendo sus delegaciones o
agencias, si las hay, es obligación y tiene la facultada para hacer gestiones,
buscar recursos, el apoyo, si los diputados por el distrito 19 no hacen lo poco
que pudieran aportar a la cabecera distrital, que es Ciudad Guzmán, porque no
sienten el compromiso y sólo trabajan por su imagen en la espera de ser
considerados para un nuevo cargo, al ayuntamiento nada le impide hacer algo más
en favor del municipio, que sólo el hecho de celebrar sesiones y cobrar buen
salario.
Mientras el tiempo y las formas de
hacer este tipo de comentarios nos lo permitan, seguiremos insistiendo en que
se puede hacer algo más por Ciudad Guzmán y su gente. No es suficiente adquirir
una barredora y exhibirla donde se pueda ver haciendo labores de recoger tierra
o basura, cuando en la mayor parte de la zona habitada los baches, los
arrastres y el polvo impide un paso de vehículos y de peatones seguro, lodo que
se convierte en polvo inunde hogares
contaminando todo, considerando que los trabajos y la atención de la
administración debe centrarse en toda la ciudad y en todos sus problemas, de
otra manera da entender que no cuenta con asesores o un plan de gobierno
aplicable al reto que presenta gobernar Zapotlán, sí, de grandes personajes,
pero también de grandes problemas.
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