Juan
José Ríos Ríos
Ante la
proximidad de los días de la Semana Santa, que inicia el domingo 10 de abril
con el Domingo de Ramos, la Secretaría de Educación Pública ha dado a conocer
que de acuerdo con su calendario las vacaciones de este período iniciarán
el lunes 11 de abril. Esto se ha dado así por usos y costumbres, pues
cada año se otorga un periodo vacacional estudiantil y en algunas empresas.
Se dice que una de las fechas más esperadas de cada año son las vacaciones de Semana Santa, las cuales representan un periodo de 15 días sin acudir a clases, y de ciertos días en algunas empresas. Pero con los fines de semana anteriores y posteriores, el periodo de descanso se puede y de hecho más de alguno, logra alargar entre el 9 y 24 de abril, para eso nos sobran pretextos e ingenio.
Hoy en día, es muy difícil pensar
en no tener vacaciones, más si tomamos en cuenta que somos uno de los países del
mundo que más vacaciones tiene durante el año. Se dice que los
griegos fueron los primeros que visualizaron la necesidad de periodos de
descanso para rendir más, pero fueron los romanos los que inventaron
las vacaciones.
Estas vacaciones eran
un privilegio destinado a las clases pudientes que abandonaban
la ciudad para acudir a los territorios del imperio, España era el lugar a
donde más iban, sin embargo en la Edad Media el ocio y el descanso se
consideraban pecaminosos, por lo que era algo que no se practicaba ni siquiera
el domingo.
En el siglo
XVIII que se puso de moda viajar, los pudientes europeos recorrían
el mundo para buscar fortuna, aventura o descansar. Ya en el siglo XIX las
vacaciones dejaron de ser un privilegio, pues la revolución
industrial además de conseguir y estipular tiempos de trabajo y descanso
para las personas, propició el acceso de la clase media a los viajes
a precios asequibles gracias al ferrocarril.
La celebración religiosa de la
Semana Santa tendrá una duración de seis días, a partir del domingo 10 y hasta
el 16 de abril. Entre las costumbres religiosas ocurre el domingo de ramos; el
jueves, viernes y sábado santa; y finaliza en el domingo de resurrección.
La semana siempre comienza
con el Domingo de Ramos. Según la tradición, este fue el día
en que Jesús viajó a Jerusalén y, para saludarlo, sus seguidores
agitaban ramas de palma. La semana continúa con el Jueves Santo, el
día de la Última Cena, y el Viernes Santo, el día de la Crucifixión de Cristo.
En cuanto a sus orígenes, en el año
325 el Concilio de Nicea fijó la fecha de celebración de Pascua para todo el
ámbito católico occidental. A partir de aquel momento, y basándose siempre en
el relato evangélico, cada país ha ido construyendo un conjunto propio de
celebraciones. A pesar de las variantes y la diferencia de costumbres locales,
la finalidad principal es celebrar o rememorar la pasión, muerte y resurrección
del Mesías.
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