El PRI, un partido agónico: JLO

 

Juan José Ríos Ríos
El Volcán/Guzmán

  

 

En las seis gubernaturas que estarán en juego las próximas elecciones en el país, el PRI está en la disyuntiva de lograr subsistir y avanzar o de plano en su extinción. El centralismo de su dirigencia nacional y la conformidad en que se ha caído, el de sólo tener representación en las cámaras a través del voto indirecto, es decir vía plurinominal, y no de ganar nada a través del voto y la confianza ciudadana, ha generado un divorcio entre la sociedad y partido.

            Así lo declaró José Luis Orozco Sánchez Aldana, exalcalde de Zapotlán el Grande y exdiputado federal por el Distrito XIX, agregando que: “El PRI, como partido, no es malo, lo malo somos la gente, en su historia se han hecho cosas buenas y malas, se le ha fallado a la gente, a su militancia. Ahora sólo se piensa en subsistir y llegar a candidaturas cómodas y seguir siendo parte de los beneficios que da el gobierno y las prerrogativas, más que llegar al cargo para servir a su comunidad, a su municipio o estado”, agregó.

            Dijo que él fue parte del proceso para la designación de la actual dirigencia nacional del tricolor que encabeza Alejandro Moreno, participando como coordinador de los trabajos por esta Región sur, considerando que era la gran oportunidad para aglutinar al partido y a su militancia, en razón de la trayectoria de quien es ahora responsable del tricolor a nivel nacional, que sería una dirigencia para la militancia y para la militancia, cayendo en cambio en un centralismo que le está representando el reto de lograr subsistir y avanzar, o de plano extinguirse.

            “El reto no es menor, implica volver al origen, como partido ha tenido mucha emigración hacia MORENA, ahora tenemos ex diputados priístas convertidos en senadores o presidentes municipales, algunos por el Partido Verde, el PRI ha sido un semillero pero se ha fortalecido la migración por la condición humana de la dirigencia, el no ver por la militancia y por el interés de su comunidad, terminando viendo sólo por sus intereses personales, por eso este año es importa, definitivo, porque será la antesala de lo que será el proceso electoral del 2024, desafortunadamente lo que estamos percibiendo es que los cambios de las seis gubernaturas que van a estar en juego este año, pues si no es gracias a la alianza, no ganamos nada”, comentó.

            Indicó que, aun así, de las seis gubernaturas que están en juego, creía que al final del juego el PRI pudiera tener la posibilidad de retener Hidalgo, si se hace un esfuerzo extraordinario de su militancia y de la propia candidata, así como el Estado de Durango. “Pero en la alianza, también, están encabezando panistas los esfuerzos de otros estados, de otras entidades del país, entonces también el panismo estará en la condición de ganar varias gubernaturas, y si ponemos a ver quién va avanzar más este año, yo creo que el Partido Acción Nacional tiene más cerca las gubernaturas que el PRI, aún con la propia Alianza”.

            Agregó que el PRI está en un momento histórico, en el cual va a luchar por seguir o desaparecer. “Esto no es un cambio de siglas, yo creo que nadie le quita reconocimiento al PRI que generó instituciones que hoy siguen vivas, que generan una gobernabilidad, servicios al pueblo y asistencia, pero también hay una buena parte del PRI que se extravió en el ejercicio del gobierno, que se cometieron grandes abusos y actos que son del conocimiento general de corrupción. El PRI, lo dio yo y los jóvenes que están en él, no tienen la culpa del pasado de quienes estuvieron en el ejercicio del poder y abusaron de él, parto de una premisa; nadie vota por alguien para que llegue a enriquecerse o servirse, cuando el electorado le da la confianza, es para que asuman su responsabilidad, que antes de pensar en él, debe de hacerlo por su comunidad y en servir. El dinero público es sagrado, es del pueblo, no puede desviarse, no se debe caer en la tentación de sacar un beneficio personal, veo que hay muchos jóvenes queriendo llegar, pero no para servir, sino para enriquecerse, se han perdido valores y el rumbo, algo generalizado en todos los partidos en general”.

            Esto ha provocado un hartazgo en la gente con los partidos y con los políticos, porque no generan dinero para subsistir, sino del dinero del pueblo, de las prerrogativas que les otorgan los estados o la federación. “No se vale que no se cumpla con un propósito que es hacer buena política, generar equilibrios, para tener un mejor estado y un mejor país”, abundó José Luis Orozco Sánchez Aldana.