Juan
José Ríos Ríos
El Volcán/Guzmán
A
partir de los usos de cambio de suelo en la Cuenca, la expansión de cultivos
protegidos y el crecimiento poblacional, se han reflejado cambios drásticos en
la laguna, convirtiéndola en un arenero de la Cuenca, un basurero y una cloaca
de la ciudad; “Un foco de infección altamente contaminante y una ruta precisa a
un ecocidio”.
Denunció que los gobiernos
anteriores no hicieron nada al respecto, y que la millonaria inversión que se
hace en la construcción del malecón y las instalaciones deportivas para la
selección de remo y canotaje, no abonan nada al problema de la laguna y de la
cuenca misma, cuando están bajo el agua y la contaminación 800 hectáreas de
tierras, ocasionando muerte de ganado, focos de infección y un grave riesgo
para los fraccionamientos que se han construido y siguen en proceso, al igual
con las instalaciones del Centro Universitario del Sur.
“Daremos seguimiento a cada uno de
los proyectos propuestos, previos estudios y apoyos de las universidades, del
tecnológico y de gentes que estén mucho más peritos que nosotros en el campo de
la investigación para intervenir este cuerpo de agua en forma adecuada e
inteligente, y no ir a causar un desastre en lugar de corregir lo que estamos
padeciendo”, abundó.
Pidió a todos la cooperación y
comprensión para que se atienda el problema, pero con la prontitud que requiere
el caso. “Debió haberse atendido desde hace años, no nos interesa ver culpables
y mucho menos qué pasó, lo que interesa es lo actual dar soluciones y seguir
adelante en la recuperación de nuestro ecosistema”, abundó en su mensaje,
previo al acto de toma de protesta, que estuvo a cargo del alcalde Alejandro
Barragán, pero que también estuvo el regidor local, Joel Salvador Bautista, así
como el alcalde de Gómez Farías, Néstor de la Cruz, y un representante del
diputado local, Higinio del Toro.
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