Un
momento por favor
J.
Jesús Juárez Martín
Se
atribuye a Aristóteles la expresión “Zoon Politikón” en su libro la Política,
cuando trataba de encontrar como se
daban las relaciones entre la Ciudad
Estado y sus habitantes; facilitamos su
comprensión, traducción popular literal: animal comunitario, político, con
necesidades sociales que tomó decisiones, donde
vivir, con quién y cómo, porque
nadie puede vivir aislado en su carácter social, hizo, hace, hará uso de la
capacidad personal y comunitaria en el lugar donde vive, alguien que vive y vive
con: convive... Negar que soy político en el quehacer social es en sí una
afirmación política.
Esas
relaciones humanas están en crisis, por las limitaciones sociales con relación
a la Pandemia actual, aunque hay diversidad de opiniones contradictorias, hasta
de autoridades políticas al respecto, ante el alejamiento y el uso del cubre
boca. En esa diversidad de
interpretaciones es interesante afirmar que las relaciones humanas es toda
clase de encuentros y desencuentros que establecemos para las satisfacciones de
necesidades materiales, físicas, sociales, afectivas biológicas, intelectuales,
educativas, de descanso, laborales de encuentros o desencuentros con los demás, se suceden en todos los grupos humanos desde
la forma simple de encuentro al azar, el
saludo o negación de él, las podemos generalizar como la totalidad de los
encuentros de dos personas, de grupos, muchedumbres que se reúnen para
laborar, disfrutar de un festival
artístico o entretenimiento deportivo al
que se dan cita los humanos encasillados
para presenciar incierto triunfo deportivo de acuerdo a sus preferencias
particulares diferentes por las personas. Debo hacer énfasis que los
desencuentros personales las luchas sociales, las mismas batallas bélicas, se
dan en todos los grupos humanos desde la forma simple del encuentro de dos
personas – el saludo - hasta la complejidad de las relaciones entre países,
tratados internacionales—En resumen: La totalidad de los encuentros y
desencuentros humanos son relaciones humanas.
La
situación actual de los cambios del calentamiento global de la Tierra y sus
riesgos, nos interpelan para mejorar las relaciones personales, comunitarias responsables
y solidarias para recuperar algo de lo que ya se extingue por hábitos viciados
en el consumo del agua, del manejo de basura, el aprovechamiento de los
recursos sobreexplotados.
Es
correspondencia de las autoridades fijar políticas en el consumo de energéticos
adecuados con acuerdos ecológicos, de reforestación, que sean a favor de la
ecología dañada por irresponsabilidades personales y comunitarias... lo más
importante es que podemos hacer mucho por nuestro planeta dentro de nuestras
actividades constantes, cambiar de actitud, puede ser incluyente para que
nuestros compañeros de escuela, si son niños, jóvenes, estudiantes en este
regreso presencial a clases, o bien con amigos, vecinos tomemos compromisos de
saneamiento de calles.
Se
comenta que el aislamiento nos ha propiciado actitudes de estrés, en algunas
veces superficiales de conductas por diversos encuentros relacionales,
procuremos que sean oportunidades y tal vez con buena voluntad encontremos
mejores formas de acercamiento a vecinos familiares al apoyarnos en momentos de
recreación en parques, unidades deportivas, o en el acompañamiento de idas y
regresos de las escuelas, o actos religiosos. Intentemos y planeemos que
nuestra indiferencia social, se convierta en oportunidad de encuentro afectivo abriendo
casi mágico con el saludo y las formas de despedirnos amistosas, nosotros
seremos quienes lo propongamos hacerlo, lo realizaremos y encontraremos los
beneficios con la amistad de los perdidos amigos.
Qué
tal si a nuestras relaciones les ponemos esas voces de acercamiento cuando se
pide algo, los resultados pueden ser estupendos, pedir por favor y luego si se
realiza, celebrarlo con una ligera sonrisa y un: Gracias sincero y de
acercamiento hacia la amistad más firme que todos disfruten.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario