Víctor
Hugo Prado
Jorge
Olvera y otros autores, nos mencionan en el ensayo La Universidad Pública:
autonomía y democracia, publicado en la Revista Convergencia que “Pensar en la
universidad es ubicar un espacio común de cientos de miles de mexicanos, que
participan dentro de sus comunidades universitarias, activa o pasivamente, a
nivel nacional o local de forma constante, a través de la educación, la
investigación o la difusión de la cultura, una visión que tiene orígenes en el
pasado medieval, que se inserta en la modernidad y expande sus alcances, ante
los grandes cambios que vivió el mundo, hasta llegar a nuestros días como un
baluarte de libertad y pluralismo”.
No
considero que la Universidad Nacional Autónoma de México se ha derechizado,
tampoco que es neoliberal o se haya puesto al servicio de proyectos
neoliberales, o que sus egresados se forman para ejercer un individualismo y
encarnan las prácticas de un aspiracionismo rampante, ni tampoco que sus aulas
se hayan llenado de conservadores. Lo
señalo frente a la crítica, malsana, innecesaria e inoportuna expresada por el
ejecutivo federal, en sus últimas intervenciones mañaneras. Qué afán de abrir
semejante frente.
La
génesis de la UNAM, está inscrita en la libertad de cátedra y la autonomía,
ésta última justamente para defenderse del intervencionismo de los gobiernos en
turno, cualesquiera que fuera su definición política e ideológica. La UNAM ha transitado
desde décadas como una fuente invaluable de libertad, creación y comunidad,
forjando un espacio privilegiado por la investigación, la docencia y la difusión
cultural que lleva a cabo. Es símbolo nacional y sede del saber, junto con
muchas otras instituciones de educación superior al servicio de la sociedad en
todas las entidades federativas, que conjuntan y reúnen las distintas visiones,
propuestas y acciones en beneficio colectivo.
Hoy
por hoy, nos lo recordó su rector, la UNAM está en el número 83 de entre 500
instituciones de educación superior, de acuerdo con el Ranking de Empleabilidad
de Graduados QS 2022; ocupa el primer lugar a nivel nacional de universidades, y
se encuentra en el 105 de las mejores universidades a nivel mundial de acuerdo
con la clasificación QS World University Rankings, también de 2022.
La
UNAM es mucho más que una institución educativa, es una universidad donde se
generan conocimientos y se transfieren a los distintos sectores de la sociedad
para resolver problemas complejos; sus académicos, alumnos y egresados, rescatan,
acrecientan y difunden la cultura, como lo expresa su rector en “un multiverso,
sin límites de ideas, saberes, creaciones e invenciones, dialéctica y redes de
aprendizaje como ninguna otra en el país y como pocas en el mundo. Por ello,
señor presidente con la Universidad no. No rotundo.
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