Juan
José Ríos Ríos
El Volcán/Guzmán
Sigue
sin permear en una buena parte de los habitantes de Ciudad Guzmán, entre
quienes tienen negocios o prestan algunos servicios, los enormes riesgos que se
tienen al incumplir las medidas puestas en vigencia por la Mesa de Salud y el
Gobierno del Estado de Jalisco desde el fin de semana anterior, para que no
haya más personas infectadas por COVID 19 o sus mutaciones, que dicen ya están
causando bajas entre la población, especialmente los jóvenes.
Es notorio ver que de cada diez
personas que caminen por la zona centro de la ciudad, más de cuatro no portan
cubrebocas, muchos no respetan la sana distancia y hay negocios en donde, si
bien es cierto han colocado tapetes al ingreso de los mismos para que los
clientes desinfecten su calzado antes de entrar a adquirir productos, pero no
tienen a la vista o a disposición de éstos el llamado gel antibacterial y, lo
más criticable; el personal que atiende no porta cubrebocas.
Ante lo que se está viendo y por
considerarlo de interés público, en síntesis, les replicamos las siete acciones
vigentes en todo el Estado de Jalisco, con obligatoriedad en todos y cada uno
de los municipios, son: No hay condiciones para el regreso a las clases
presenciales hasta nuevo aviso; las oficinas corporativas y los servicios
profesionales estarán trabajando desde casa, salvo aquellos casos que sean
necesarios, obliga el cierre de actividades que generen acumulación de
personas, actividades lúdicas y de recreación por los siguientes quince días.
La cuarta medida incide en el cierre
de espacios públicos, abiertos o cerrados, también se restringe la actividad
social y familiar, porque se considera es donde está el principal problema, las
personas mayores de 60 años se deben quedar en casa, y la séptima comprende,
ante la dureza del problema de salud pública y económica que se vive, no
impactar el derecho que tiene la gente de trabajar para sostener a sus familias.
Sin duda que las siete medidas
puestas en vigor son menos tirantes que las anteriores, cuando se obligó al
cierre y paralización total de todo tipo de actividades, y aun así seguimos
tercos a no respetarlas, a no cuidarnos personalmente ante la “imperiosa”
necesidad de andar en la vía pública, consumiendo bebidas alcoholizadas o
participando en eventos sociales, sean en familia o con amigos.
A los adultos se les restringe no
solamente a quedarse en casa, también se les priva ingresar a comercios o
negocios, en algunos de los cuales limita a uno por familia con la condicionante
de no ser mayor de 60 años, por considerar que es el sector de población más
vulnerable, aunque en su gran mayoría y según datos oficiales están vacunados,
teniendo éstos necesidades personales que cubrir.
Sin embargo a la mayoría de los jóvenes
se les brinda o se otorgan toda la libertad de movilidad y son éstos los que
actualmente están siendo víctimas del contagio por COVID 19, proceder que se
tiene que corregir desde casa, por los mismos jóvenes o por sus mayores, sus
padres, es por su salud, por la salud de todos, los hospitales están mucho en
tope, una tercia de los estados están en semáforo rojo, es cuestión de voluntad
personal, individual, el gobierno dispone, los ciudadanos – en una buena parte
– incumplimos o no respetamos reglas que son por el bien público.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario