Sandra
Gómez
Estimado
lector, en esta ocasión dentro del Taller de Educación Financiera (EF) me
inspiro en una de las personas quien como MENTOR y discípulo de Napoleón Hill se
ha distinguido, y sigue vivo para deleite de todos quienes le seguimos.
Bob
Proctor, nació en Toronto, Ontario, Canadá en el año de 1934. Es autor de Best
Seller, de profesión vendedor y protagonista del secreto (2006) que hace
referencia a la ley de la atracción. En esta ocasión solamente me referiré a la
cualidad de la paciencia como una de sus múltiples enseñanzas.
Todos
los neurotípicos tenemos IDEAS, para que estas ideas transmuten al plano de la
realidad, se requiere de un camino que puede ser corto o largo y que en horas
no lo podemos medir apriori. No tenemos la certeza de cuánto tiempo se demore
para “florecer nuestra idea”; por lo tanto, debemos tener FE, entendida como
una cualidad positiva del ser humano quien entrena su mente a diario y suma los
conocimientos y/o habilidades para llevar a cabo su idea, visualiza y se rodea
de todas las lecturas y personas quienes saben del tema de lo que él desea
hacer y ve en su mente realizado, es decir conoce lo que quiere y busca incansablemente
la manera de lograrlo ejecutando los consejos y aplicando los conocimientos que
transforma en habilidades hasta el punto de hacerlas hábitos.
En
coincidencia con Bob Proctor, he observado entre mis pacientes y alumnos de
posgrado que las personas dejamos nuestras METAS en el camino por falta de
paciencia. Si volteamos a ver la naturaleza, sabemos cuánto tiempo le toma a
una zanahoria florecer y dar fruto (60-70 días), sabemos cuánto tiempo le toma
a un ser humano para nacer, es decir MADURAR (38-40 semanas), y podríamos
seguir una larga lista de eventos entre los Seres vivos en los que sabemos un
tiempo muy cercano en el que veremos el fruto de nuestro esfuerzo de cuidado de
la semilla hasta llegar al resultado óptimo.
Las
ideas por su parte durante más ambiciosas sean demoran más tiempo en germinar,
de aquí que la paciencia debe ser entrenada y se deben aprender a medir a
diario los pasos dirigidos hacia la meta, es importante llevar una bitácora a
manera de registro fiable de LOGROS.
Las
IDEAS son semillas en nuestra mente, y florecen tanto las buenas como las
malas, así que debemos tener cuidado con nuestros pensamientos. No debes dudar
de ti, deberás desarrollar tu autoconfianza, toda persona quien te envidie es
un ignorante, porque esa persona podría alcanzar tu éxito si tan solo se lo
propusiera y trabajara tan duro como tú para alcanzarlo. Aléjate de las
personas quienes no te aportan y en cambio busca personas de quienes puedas
aprender.
El
éxito se alcanza cuando te rodeas de “Los Mentores Adecuados” y confías en lo
que te dicen porque ellos mismos con hechos pueden demostrar lo que te piden
que hagas. De acuerdo con la bibliografía que hemos revisado a lo largo del
Taller de educación Financiera encontramos el libro de Napoleón Hill “piense y
hágase rico”. En coincidencia fue el primer libro que BOB PROCTOR leyó del
tema; se dejó guiar, cambio su paradigma, consiguió un mentor, así logro su
éxito PERSONAL y económico.
Cambiar
un paradigma es en sí mismo cambiar un MODELO mental, es transformar el
recipiente de tus ideas; no es un trabajo sencillo por eso requerimos de un
MENTOR quien nos ponga en el sendero del éxito.
“Debes
enamorarte de lo que haces y enamórate de la idea del amor” (Bob Proctor).
Sigue una fórmula ganadora como la de Bob Proctor, cada mañana agradece por
diez cosas, y por la noche escribe 6 actividades que te llevaran a cumplir tu
meta. Es decir, trabaja en tu idea, y agradece por tus logros alcanzados y tu
bienestar.
Todos
tenemos las mismas 24 horas, solo que cada quien las administra de manera
diferente, hay que tener paciencia y esperar los resultados, sin dejar de trabajar
sobre ello. Para Proctor “la voluntad es una facultad mental que te da la
capacidad de mantener una idea en la mente y excluir todas las distracciones”.
Así
que, siendo paciente, disciplinado con la voluntad inquebrantable, seguramente
lograras tu ÉXITO. Una persona tiene éxito si sabe a dónde va y sigue en esa
dirección sin vacilar; debemos pensar que el éxito es la realización progresiva
y sistemática para alcanzar un IDEAL digno y particular. A menudo se relaciona
con el dinero, pero el éxito no es el dinero en sí mismo sino el bienestar que
te proporciona.
En
este curso he escrito con frecuencia que el dinero es nuestro amigo y con el
podemos beneficiarnos y beneficiar a muchas personas, debemos cambiar nuestro paradigma
acerca de la riqueza y crear MENTES millonarias, aprender y aceptar a ser personas
solventes económicamente que podamos vivir bien y compartir. Agradece (ARIGATO)
cuando el dinero llega y cuando lo das, controla tu felicidad, se paciente.
Aprende a sacar tu perfección en todo lo que hagas, las personas te seguirán
por lo que eres y ofreciendo tus servicios o productos a un mayor número de
personas también llegara mayor cantidad de dinero.
Valora
lo que haces y agrega VALOR a tu servicio y/o producto. El éxito no se alcanza
sin acciones sucesivas dirigidas a un propósito. Esperar a que se materialice
nuestra idea no únicamente requiere de paciencia, también requiere de tener la
meta clara y rodearte de los conocimientos y de las personas quienes aporten soluciones
creativas y/o innovadoras para la materialización de tu IDEA.
Hasta
la siguiente historia de vida, espero leer tus comentarios, te invito a que
compartas y ayudes a que más personas lleguen a su éxito a través del
desarrollo personal acompañado de Educación Financiera. Dra. Sandra Gómez
Patiño.
Referencias:
No hay comentarios.:
Publicar un comentario