El
Volcán/Sader
Está
en marcha el corte y envasado del tamarindo en varias localidades de municipios
de la Región Costa de Jalisco, una fruta en la que el agro estatal tiene el
liderazgo nacional, según lo reportan cifras oficiales.
La Dirección de Fomento Hortofrutícola de la
Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER Jalisco) tiene entre sus tareas
el contacto con autoridades municipales y productores para que esta fruta
tropical sea motivo de valor agregado, lo que gradualmente ha avanzado con las
aportaciones de los extensionistas en la transformación del producto en salsas,
bebidas, dulces y aderezos.
El director de desarrollo Económico y Rural de
Cuautitlán de García Barragán (municipio líder en la producción de esta fruta),
Rigoberto Muñoz Orozco, refirió que la cosecha, junto con la limpieza y
envasado del tamarindo, son una importante fuente temporal de empleo durante
alrededor de tres meses, lo que supone la generación de empleo para unas mil
personas en este municipio, e incluso la apertura de más oportunidades para mano
de obra foránea.
El funcionario municipal hizo notar que la
producción de las dos mil hectáreas que se tienen en Cuautitlán, genera un buen
número de jornales para varones en la fase del corte y acarreo, y para mujeres
en las empacadoras que se encargan de la limpieza y del envasado para el envío
de la fruta a los mercados, tanto doméstico como de exportación.
Muños Orozco detalló que prácticamente 90% de las
plantaciones de tamarindo se ubican en las inmediaciones de la población de
Tequequistlán.
La
cosecha termina con la llegada del periodo de lluvias, de modo que después la
fruta se manda a sus destinos para el consumo, siendo la época de Navidad, uno
de los periodos de más consumo debido a la preparación del tradicional ponche.
Por
cierto, entre los resultados de mejoramiento de las variedades de tamarindo, el
Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias
(INIFAP) generó la variedad mejorada de tamarindo Colima 204, con
características especiales para el trópico seco del Pacífico Centro de México.
Especialistas del Instituto han señalado que esta
nueva variedad se encuentra en proceso de adopción por los productores de
algunas regiones de los estados de Colima, Jalisco Michoacán y Nayarit, y entre
sus propiedades destaca la precocidad y productividad en comparación con el
tamarindo criollo.
Asimismo, con la adopción de esta variedad en altas
densidades de plantación (158 a 185 árboles hectáreas) y con irrigación, el
productor podrá duplicar o triplicar el rendimiento promedio en los primeros 10
años de edad del huerto, indicaron las investigaciones.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario