miércoles, 28 de abril de 2021

Problema sin solución



 

Juan José Ríos Ríos

 

 

Mientras el tiempo pasa, los accidentes se siguen dando, se pierde mucho tiempo en cubrir su trayecto y los cobros siguen aumentando, nada se ha hecho para cambiar el estado que guarda la llamada autopista Guadalajara/Manzanillo, sobre todo en el tramo que va de la caseta de cobro Sayula a la que se ubica en San Marcos, en el estado de Jalisco.



            A la fecha, ir de Ciudad Guzmán a la vecina Ciudad de Colima le cuesta al usuario que se moviliza en vagoneta o automóvil la cantidad de 324 pesos, ida y vuelta, a lo que se suma el penoso y peligroso tránsito por los dos carriles únicos que operan debido a la excesiva carga vehicular que representan los camiones de carga conocidos como tráiler.


            Esto se debe a que no se ha abierto al paso de los vehículos el tramo que va de Ciudad Guzmán al Crucero Cuatro Caminos, pues los otros dos carriles que desembocan en la caseta de San Marcos, donde la apertura detenida debido a un litigio interpuesto por un propietario de terreno que resultó afectado por el trazo de la autopista y que no se ha resuelto todavía.





            Por ello, los conductores de vehículos particulares y de pasaje, la mayoría de las veces quedan expuestos al paso lento de los grandes y pesados camiones de carga, los más hasta con dos tractos camiones anexados pese a que están prohibidas, lo que no justifica ni el precio pagado ni tampoco garantiza un tránsito seguro, y como ejemplo están los múltiples accidentes que ocurren en el trayecto de manera continua.


            De igual forma, los trabajos de mantenimiento dejan mucho que desear, son lentos y por largos trayectos, sobre todo en el tramo que corresponde a Colima, lo que contribuye a que el paso de Colima a Ciudad Guzmán sea más lento, tardado y con grandes riesgos debido a que muchos conductores, en su desesperación por llegar a su destino, hacen rebases de zonas de alto riesgo, sin visibilidad y exponiendo a los demás.


            Lo curioso es que, mientras que a los conductores de vehículos particulares se les sanciona por circular a velocidades que exceden los límites autorizados, multas que son muy considerables económicamente hablando, nadie toma en cuenta el hecho de que muchos tráileres circulen con doble tracto camión, o bien, en el ánimo de eludir el pago de casetas, utilicen el trayecto carretero que entronca en Tonila para salir en Cuatro Caminos e incorporarse a la autopista rumbo a la capital de Jalisco y otros destinos, donde también provocan accidentes o son ellos víctimas de percances debido a su tamaño, peso, sinuoso y estrecho del camino.


            Todo esto y más ocurre en la zona de mayor riesgo del trayecto debido al terreno, lo que debiera ser un motivo más para que ya se abran los dos tramos pendientes para que el tramo de Colima a Guadalajara sea por los cuatro carriles, dos de ida y dos de retorno. Así, habría un poco más de seguridad de moverse de un lado a otro pese a la presencia de los camiones de carga que, en las zonas de montaña hacen un paso muy lento y peligroso para los demás, y de paso justificando el cobro que se hace por el uso de mal llamada autopista Guadalajara-Colima.




     

                   

           

           

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Popular Posts