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jueves, 18 de marzo de 2021

La división de poderes


 


 

Víctor Hugo Prado

 

En el texto ¿Qué es el Poder Judicial de la Federación? Publicado por la SCJN, por cierto, con un enfoque muy didáctico, se expone que para que el Estado no pueda ejercitar un poder sin límites sobre los individuos y evitar el abuso del poder, es fundamental que el Estado cuente con una división de poderes.



Desde que el hombre surgió sobre la Tierra –se expone en el texto- tuvo que esforzarse para convivir con sus semejantes. Para resolver los problemas que se presentaban entre los diversos individuos, creó leyes que regularan el comercio, los impuestos y el matrimonio. Desafortunadamente algunos gobernantes abusaron de estas leyes al crearlas, modificarlas y aplicarlas a su albedrío. Más aún, creyeron que en caso de que alguien no estuviera de acuerdo con este proceso, mismos podían juzgarlo y castigarlo. Esto provocó descontento entre los ciudadanos y, a la larga, causó desorden y revoluciones. Algunos pensadores como John Locke, en Inglaterra, y el barón de Montesquieu, en Francia, durante los siglos XVII y XVIII, respectivamente, advirtieron la necesidad de fraccionar el poder público para limitarlo y evitar su abuso, por lo que promovieron la idea de que el poder no debía concentrarse en una sola persona. Sostuvieron que, para fortalecer a una nación, era necesario que existieran diversos órganos del Estado que tuviesen funciones distintas: unos elaborarían las leyes, otros las aplicarían y unos terceros resolverían los conflictos derivados de su aplicación. Los mencionados pensadores vieron en la limitación del poder público una verdadera garantía de la libertad individual.


En México la propia Constitución creó al Poder Judicial de la Federación, al cual confirió la defensa del orden constitucional, que queda garantizada mediante el juicio de amparo previsto en el artículo 97 de la Constitución Federal. Lo que ha hecho que dicho Poder se revele como un factor de equilibrio entre los Poderes de la Unión.





Traigo a colación las citas del texto porque la Ley de la Industria Eléctrica recientemente aprobadas por las Cámaras de Diputados y Senadores fue frenada mediante una suspensión provisional otorgada por el juez de distrito Juan Pablo Gómez Fierro; y cómo era de esperarse, fue linchado desde la máxima tribuna presidencial, acusándolo de estar sometido al servicio de particulares. Pasa desapercibido el hecho de que la suspensión como la otorgada por Gómez Fierro es justamente proteger a particulares contra las arbitrariedades del gobierno. Sin poder ir a fondo por el tiempo limitado, solo podré agregar que las apreciaciones jurídicas del juez son porque la Ley aprobada podría dañar la competencia, tanto de los competidores, como de los consumidores, y afectar irremediablemente el medio ambiente, basando la producción de energía en la quema de combustóleo. Por el bien de México el Poder Judicial debe actuar con autonomía e independencia y garantizar el equilibrio y facultades de los poderes.

 

 


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