Juan
José Ríos Ríos
El Volcán/Guzmán
A decir
del alcalde Zapotlán el Grande, José de Jesús Guerrero Zúñiga, en la próxima
semana podrá estar en funciones la planta alta del nuevo Mercado Constitución,
en donde los comerciantes que aprovecharán las nuevas instalaciones ofertarán
diversos platillos y servicios, muy distintos a los que ocupan y se ofrecen en
la planta baja, con el atractivo panorámico de las terrazas anexadas al
inmueble que se localiza en un punto estratégico, muy atractivo del Centro
Histórico de Ciudad Guzmán.
Como se recordará, las obras de mejoras y de ampliación en el Mercado
Constitución, son producto de un proyecto promovido y apoyado con recursos de
la SADER Jalisco, en donde los municipios hicieron su aportación, la parte que
en dinero les correspondía, en un afán de rescatar y mejorar las condiciones en
que se encuentran los mercados, no solamente del municipio sino del estado
mismo, lo que favoreció la nueva imagen, la nueva fuente de trabajo y de
servicios que se tienen para los habitantes de la ciudad y de quienes gusten o
puedan disfrutar de los servicios y atractivos que aquí se ofertarán.
El antiguo inmueble de este mercado,
realmente no era un lugar digno para el comercio y éste se hacía de manera un
tanto desordenado, arbitrario, con pocos atractivos y sobre todo comodidades
para el usuario, para el consumidor, un punto gris de la ciudad que pasó a ser
un modelo que, en su tiempo, se dijo serviría como modelo para replicarlo en
otras ciudades del estado de Jalisco, que si lo es o no, cuando menos en la
ciudad se tiene algo diferente, moderno y digno del desarrollo que empieza a
generarse en la ciudad en cuanto a equipamiento urbano y para el servicio de la
población.
Sin duda que el nuevo Mercado
Constitución debe ser usado y administrado bajo un reglamento que regule las
condiciones para lo cual fue edificado, es decir, mejorar la calidad en imagen,
servicio y atención al público, acabar con la imagen de mercado de rancho grande,
con amontonamientos y mantas colgando por todas partes, afeando el edificio y
siendo un punto escuro de la ciudad. Hoy es otra imagen, se eleva la calidad de
la zona, que en ese sentido sea lo que se oferte al cliente y no vaya a
convertirse, en el poco tiempo, en un lugar al que no se puede ir con la
familia y las condiciones de higiene y seguridad que merecen todos los
ciudadanos que puedan y quieran ir a este espacio, que es público, de todos.
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