Estimado
lector en el siguiente artículo de opinión usted encontrará una frase que me
parece muy hermosa que he escuchado en voz del Dr. Cesar Lozano que dice:
“Envía rosas al cielo”.
El
duelo es una de las experiencias de mayor impacto por las que el ser humano
pasa a lo largo de su vida. El impacto se encuentra directamente relacionado
por las circunstancias y/o situaciones alrededor del fallecimiento.
Para
la mayoría de las personas es importante recibir ayuda para superar el duelo,
se deben pasar una serie de etapas para volver a estar bien. Asimismo, existen
varios tipos de duelo, y por ello la secuencia y duración de los pasos es
diferente, pueden ser horas o años, de aquí la necesidad de asesoría
especializada en muchos casos. Recomiendo ampliamente las lecturas de Elisabeth
Kübler-Ross, publicado en el año 1969 en el libro “On Death and Dying”; en sus
trabajos la escritora comparte sus experiencias y casos de éxito; les invito a
darle la oportunidad de hablarle directamente a través de la lectura de sus
libros y artículos relacionados con el tema del manejo del DOLOR.
LAS
ETAPAS DEL DUELO. 1. Negación; 2. Cólera o Ira; 3. Negociación; 4. Depresión;
5. Aceptación. La mayoría de las personas pasamos alguna vez por una fase de
luto o duelo ante la pérdida, con frecuencia es algo de lo que cuesta hablar. Para
la Dra. Kübler-Ross existen cuatro tipos genéricos de pérdidas: 1. Relacionales;
2. Pérdidas de capacidades (por ejemplo, alguna amputación); 3. Pérdidas
materiales; y las 4. Pérdidas evolutivas (deterioro físico, vejez, jubilación).
En
este artículo solamente nos enfocaremos en las perdidas relacionales, mismas
que tienen que ver con la perdida de personas; por ejemplo, la separación con su
pareja o la muerte de seres queridos. El luto es diferente para cada persona,
no es algo que necesariamente logremos “superar”. Es muy importante llegar a
aceptar el hecho (la muerte) y aceptar la posible consecuencia de depresión.
Ponga atención a sus propias palabras y las frases que escucha a su alrededor: Las
palabras “siempre”, “nunca” y “absolutamente” pueden ser el inicio de una
depresión. Recordemos que la muerte es parte del ciclo de la vida. Es un hecho
que va a pasar, todos vamos a sentir tristeza, todos vamos a “extrañar a alguien”,
en mayor o menor medida; en algún momento sentiremos tristeza y el manejo de
esta es lo que logra canalizarla como una emoción que no da no dañe nuestra
salud física y/o emocional.
Las
rosas de su jardín que dicen te amo (…), con aroma y con espinas. ¿Cómo
enviarlas al cielo? Es tan simple como hacer obras por otros, ofrecerles a Dios
en nombre de nuestro ser amado 🙏. Al despertar debo dar gracias por mi salud 🙏. Al anochecer debo dar gracias por
lo que poseo, al medio día debo dar gracias a las manos que hicieron posible mi
mesa con alimentos. Ofrecer mis conocimientos a quien no puede pagar por ellos
es enviar rosas al cielo. Dar gracias es importante, ponernos en acción es
crucial para hacer llegar nuestra gratitud a quienes se nos adelantaron.
Dios
me ama 🙏
y multiplica mis clientes para que yo aprenda de ellos y compartamos juntos
nuestras obras para formar mejores seres humanos 🙏; si logro motivar a una persona,
esa persona motivará a otra y la cadena de buenas obras harán una mejor
sociedad.
Si
quieres llevar flores al panteón muy bien hazlo; aun así, no dejes de promover
el nombre de tu ser querido, habla de él o ella, comparte sus enseñanzas,
alivia tu dolor hablando de esa persona amada, compartir es amar; el amor es un
verbo; por lo tanto, implica acciones.
Demuestra
con acciones tu cariño ❤️, visita
a los ancianos y enfermos, en muchas ocasiones únicamente necesitan compañía;
la frase del Dr. César Lozano de” enviar rosas al cielo” me gusta, por su
simplicidad. “El dolor es temporal el orgullo para siempre” dice la Dra. María
Esther Uriegas, el orgullo de haberles tenido presentes en nuestra vida,
personas quienes nos apoyaron en nuestras vidas y profesiones como con quiénes
aparecieron en nuestra vida por poco o mucho tiempo y compartiendo sus saberes
con nosotros; a ellos envío mis rosas al cielo.
Comenta
comparte y piensa en todo lo bueno que te ha dejado tu ser amado. Demuestra
orgullo por él o ella realizando buenas obras; dona tiempo y quehaceres en
su nombre, si le gustaba escucharte cantar, hazlo; si le gustaba tu cocina,
comparte; si se sentía orgulloso de ti por ser médico, enfermera, terapeuta,
maestro (…), ejerce, comparte tus saberes.
Dios
contigo. Bendecido quien en su nombre hace el bien sin mirar a quién. Hasta la
siguiente historia de vida. Dra. Sandra Gómez Patiño.
Referencia:
https://psicologiaymente.com/psicologia/tipos-duelo
Hermoso articulo sobre el duelo, felicidades querida amiga Sandra, me sirvió para entender muchas cosas y poner en practica otras. Felicidades un fuerte abrazo.
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