Páginas

miércoles, 24 de junio de 2020

Manuel Baeza está orgulloso de la UdeG. Yo también









Víctor Hugo Prado


Ayer se publicó en Milenio Jalisco un artículo de Manuel Baeza, actualmente director editorial de ese medio. Baeza es licenciado en comunicación, egresado del ITESO, ha colaborado en una importante cantidad de diarios en el estado y el país.

El texto que publica lo titula “orgulloso de la UdeG”. Se describe jalisciense, orgulloso de la Universidad de Guadalajara, que no es su alma mater, pero que lo representa por todo lo que ha visto en meses recientes. Sobre todo, hace alusión a la respuesta de la casa de estudio estatal ante la epidemia del coronavirus al que le parece encomiable.

No es para menos, la UdeG ha hecho lo que esté en sus manos y más allá de ellas para contribuir a salvar vidas. Nadie puede regatear que ha puesto al servicio de la sociedad jalisciense y de las propias autoridades estatales a sus expertos en salud, médicos, especialistas, profesionales de la enfermería, nutrición, psicología o epidemiología.




Las acciones anticipadas para reducir la movilidad, el despliegue de talento para que el ciclo escolar concluyera con éxito, la diversificación de opciones virtuales generadas, desde un webinar para abordar diferentes temas de la ciencia y la academia. La creación de la sala de Situación en Salud del CUCS que realiza estudios y recomendaciones ante la evolución de la pandemia.

La instalación de un 'drive thru' de detección activa de la Covid-19, para realizar pruebas PCR en las instalaciones del Centro Universitario de Ciencias de la Salud como parte del plan Radar Jalisco: sistema activo de detección de casos que incluye centro de atención telefónica, módulos fijos para la aplicación de pruebas y laboratorios de diagnóstico.

Manuel Baeza escribe, “lo mismo se ha visto a estudiantes creando equipos de protección para trabajadores de la salud, que personal haciendo pruebas para detectar covid-19, o académicos realizando análisis técnicos sobre la pandemia. También –señala- hay que reconocer los programas universitarios para entregar apoyos a estudiantes con menos recursos, y en general a la población estudiantil adaptándose a las clases a distancia.

Una de las acciones relevantes en plena pandemia, fue el anuncio de ayer del rector Ricardo Villanueva para convertir las instalaciones del Hotel Villa primavera propiedad de la Universidad, en un centro de aislamiento voluntario y reducir la cadena de contagios que puede provocar una persona infectada en el seno familiar. Con datos expresados por el mismo rector, más de 100 trabajadores del Club deportivo UdeG, 20 médicos, 10 enfermeras, 4 psicólogos y 4 nutriólogos estuvieron dispuestos a dejar a sus familias de manera voluntaria, para cuidar a pacientes asintomáticos en este centro de asilamiento.

Concluyo con las palabras escritas por Baeza, “esa actitud y capacidad de trabajo hacen de la comunidad universitaria un ejemplo a seguir…Una universidad que se involucra con la sociedad en las buenas y en las malas, es un faro siempre”. Me adhiero a lo dicho.



No hay comentarios.:

Publicar un comentario