Víctor
Hugo Prado Vázquez
Ayer
fue publicada la lista de los nuevos alumnos de educación superior y media
superior en la Universidad de Guadalajara, que iniciaran cursos unos en agosto
y los menos en febrero del siguiente año. A licenciatura aspiraron 54, 335 jóvenes
de los cuales ingresaron 18,162, éstos representan el 33.43 % del total de
aspirantes; en otros términos, ingresaron 3 de cada 10 alumnos. En materia de educación media superior hubo
68,346 aspirantes, se admitieron en el ciclo escolar 2019-B de agosto a 36,611
y en el 2020-A de febrero a 19,424. Los no admitidos sumaron 12,311, logrando
un porcentaje de admisión del 81.99 %; el ingreso fue, en otras palabras, de 8
de cada 10.
Tomo
los datos de la Universidad de Guadalajara para referir lo que en la realidad
sucede, y es de suyo, un grave problema de oportunidades para los jóvenes: hace
falta generar más espacios para atender las necesidades educativas de los
jóvenes. Hace falta promover la oferta educativa que ofrecen otras muchas
instituciones del Estado, sean federales o estatales y que representan una
alternativa de formación.
De
lo que se trata es que no se queden sin estudiar miles de jóvenes con los que
no se cumple el derecho a la educación que desde 1948 está consagrado en el
artículo 26 de la Declaración de los Derechos Humanos de la Organización de las
Naciones Unidas (ONU), que en síntesis establece que “toda persona tiene
derecho a la educación…ésta debe ser gratuita...La instrucción técnica y
profesional habrá de ser generalizada; el acceso a los estudios superiores será
igual para todos, en función de los méritos respectivos”.
El
Estado mexicano debe invertir más en educación, en los Tecnológicos, en las
Universidades Estatales, en la Universidad de Guadalajara, sobre todo porque
son instituciones consolidadas y en consolidación, saben su quehacer, tienen el
expertise, han cumplido a cabalidad con sus fines. Se trata de no querer hacer
de cualquier local una Universidad como es la aspiración del gobierno federal.
De
la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos solo referiré una
parte de lo que se señala en el artículo 3º. “Toda persona tiene derecho a la
educación. El Estado… impartirá y garantizará la educación inicial, preescolar,
primaria, secundaria, media superior y superior.” Y en la fracción X se expresa
que “La obligatoriedad de la educación superior corresponde al Estado. Las
autoridades federal y locales establecerán políticas para fomentar la
inclusión, permanencia y continuidad, en términos que la ley señale. Asimismo,
proporcionarán medios de acceso a este tipo educativo para las personas que
cumplan con los requisitos dispuestos por las instituciones públicas.” Así o
más claro deben orientar las decisiones futiras de la educación. Dos
instrumentos normativos que establecen por un lado, derechos de los jóvenes; y
por el otro, obligaciones para los gobiernos local y federal.
*Director
de Educación Media Superior. Secretaria de Educación Jalisco.
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