*Samuel Gómez Patiño
Corría el año de 1985, estaba
terminando mi último semestre de la licenciatura en administración de empresas
en la Universidad Autónoma de Baja California, en mi natal Tijuana, cuando tuve
la oportunidad de conocer la organización Toastmasters “Para pensar, escuchar y
hablar correctamente”.
Recuerdo
haber sido invitado por el maestro Raymundo Motolínia Medina, quien nos
impartía el seminario de Recursos Humanos. El grupo sesionaba los viernes de
8:00 a 10:00 de la noche e iniciaban puntualmente. Los socios lucieron
amigables, todas personalidades de la ciudad que en su mayoría eran dueños de
sus negocios y otros profesionistas.
De
manera principal, las sesiones se dividen en tres secciones (aparte lo
administrativo): una parte de discursos improvisados, mejor conocido como la
dirección de temas, los discursos preparados y la última y no menos importante
la evaluación de las actividades realizadas durante las dos horas que duran las
sesiones. Toda una mecánica para desarrollar la oratoria, la evaluación y la
comunicación eficaz. Mi primera participación dos minutos en completo silencio
en la dirección de temas.
En
mi primera instancia en la organización milite durante 5 años donde fungí como
presidente, vicepresidente educativo y represente a mi club en los concursos de
oratoria humorística logrando destacados lugares. Me retire durante 20 años y
en el 2011 me reencontré con viejos amigos que me invitaron a integrarme al
Club Toastmasters Ejecutivo de Tijuana, del cual fui presidente en el semestre
que termina y donde he trabajado para lograr avanzar en el programa educativo
por lo que soy Comunicador competente plata y Líder avanzado bronce, además de
ser el Director del Área 1, de la División A del Distrito 113.
El
pasado mes de mayo se realizó la primera convención bajo el nuevo esquema de
Distrito, ahora el 113 que abarca el norte de la república mexicana, antes el
34 que representaba a todo el país. Bajo el liderazgo de María Teresa Babun
Villarreal el comité se dio a la tarea de organizar la primer convención de
nuestro distrito, el 113 en el municipio de Playas de Rosarito y ¡Como si fuera
la primera vez! Se convirtió en todo un lema de los socios Toastmasters que
pertenecemos a esta área, el norte del país.
Te
comento que para tu servidor y algunos otros socios si fue la primera vez y nos
llevamos una grata sorpresa debido al orden con que se llevó acabo y a la
oportunidad no solo de observar y aprender de los grandes oradores de cada
división sino por los eventos programados que afianzaron el aprendizaje de los
presentes. Una brillante inauguración con rompehielos literalmente incluido, ya
que entre los miembros del comité y los demás líderes de cada división y área
rompimos una barra de hielo a martillazos, simbolizando el inicio de este
evento.
Muy
acertada la invitación de ilustres conferencistas de quienes aprendimos la
importancia del servicio, lo que al final de cuentas es lo que desarrollamos en
la organización.
También tuve la oportunidad de unir
lazos de amistad con compañeros de nuestro estado pero sobre todo de quienes
nos visitaron de lejos, de Chihuahua, Baja California Sur, Sinaloa, Zacatecas,
Tamaulipas, en fin, de muchas ciudades del norte de nuestro país.
Tuve la oportunidad de estar en la
sesión muestra del primer Club Toastmasters que sesiona totalmente a distancia,
un club que no tiene un espacio físico para realizar las actividades propias de
la organización, sino que se conectan vía internet, lo que ocasiona que puedas
compartir con miembros de diferentes nacionalidades y pensamientos, lo que
enriquece cada sesión. Me pareció bastante interesante.
Por supuesto, no podemos dejar de
comentar que la reunión era principalmente para llevar a cabo los concursos que
enfrentaron a los ganadores de cada división, en discursos preparados tanto en
español como en inglés así como en temas improvisados de manera igual, en los
dos idiomas. Me pareció interesante ver las diferentes formas de presentación
de la oratoria (según la región de la que provienes) así como los mensajes que tiene
cada orador, que en muchos casos reflejan las preocupaciones de la sociedad.
¡Como si fuera la primera vez! Fue
un éxito. Mis felicitaciones a los organizadores por tan ardua labor y porque
nos demuestran que lo que aprendemos en la organización Toastmasters, vale la
pena.
La
próxima semana: “Mi amigo fiel”.
Me
gustaría leer tú opinión, puedes escribirme al correo samuelgomez@uabc.edu.mx o en Facebook: Samuel Gómez Patiño
*Director del Área 1 de los
Toastmasters y
Vicepresidente de membresías del
Club Ejecutivo de Tijuana
Licenciado y Maestro en
Administración de Empresas
Catedrático en la Facultad de
Contaduría y Administración, en Tijuana
Universidad Autónoma de Baja California
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