Va la reforma educativa

Un momento por favor           

J. Jesús Juárez Martin

Entre los objetivos básicos de toda sociedad, está el diseño del perfil educativo para sus ciudadanos, y ello implica lo mejor de sus valores para la construcción de las realidades que puedan facilitar una mejor convivencia de la comunidad.

Nuestro México tiene realidades nuevas y oportunidades y ante los problemas que afronta   muy difíciles, felizmente hay opciones de mejoramiento humanitario con cambio de actitudes, uno de los objetivos esenciales es el de la Educación, que es la herramienta que ayuda a construir los sueños del futuro.

El gobierno federal en el afán de su misión legisladora anhela una Reforma Educativa, descalificando la del sexenio anterior, pretende sea eficaz para los pertinentes cambios   en la deteriorada realidad; tal vez los niveles de instrucción de la ciudadana sean los del más alto desarrollo histórico, pero esa capacidad para hacer, transformar, crear, no conlleva  necesariamente al acercamiento a las necesidades alternas de otros grupos sociales, la generosidad y poco sentido humanitario prevalece, la desconfianza comunitaria ante los planteamientos y el lenguaje que se satura de expresiones ambivalentes y significados diferentes en beneficio de grupo o personales e ignoran el respeto fraternal y humanitario, se busca ordinariamente el mejoramiento egolátrico para sí y con los cercanos, atropellando derechos de los demás, el Poder Legislativo  del Estado Mexicano asume para sí la rectoría y pretende aprobar la Reforma Educativa, en muy cercana fecha  según su deseo y posibilidad mayoritaria para ejercer soberanía y rectoría de la educación desde la primera infancia, hasta los especialidades profesionales y doctorados, rigiendo las entidades federativas.

Cada cambio de gobierno, renovamos actitudes y esperamos, optimistas mejores realidades en un futuro cercano, y lo real es que la complejidad comunitaria disminuyó evidentemente la seguridad social en poco tiempo, actualmente cuestionar o pensar diferente, se recibe descalificación y prejuicio como mafioso, es una forma de segregar opciones, juicios y percepciones ciudadanas.

Si se alcanza la rápida aprobación de la Reforma Educativa, como parece construirse, ojalá que Diputados y Senadores en su alta investidura representativa, hagan lo que mejor conviene a un México vapuleado, a un pueblo violentado por actos criminales que no hay capacidad de corrección institucional o que de ahí mismo surgen los riesgos.

Que la aplicación de la ley sea un imperativo con sentido democrático y no de grupos que tergiversan la organización magisterial y se olvidan de su vocación formativa, que los docentes como trabajadores de la educación, encuentren seguridad profesional y social en sus calificados servicios.

            Esperamos que los programas se fundamenten en la ciencia, tecnología, la moral y pedagogía para el desarrollo  humano, ecológico y comunitario que restituya confianza, respeto humano a la naturaleza, para beneficios múltiples al ambiente y a la humanidad   con sano descernimiento de las posibilidades instrumentales para la solución de problemas.

Tengamos presente que la educación es proceso social, de instrucción, de la formación de las generaciones nuevas en promotoras de prosperidad, bienestar, relaciones cordiales con los demás, en convivencia, sin luchas fratricidas, produciendo, consumiendo, intercambiando satisfactores y cultura como pueblos con relación en la comunidad universal con relaciones respetuosas a la vida, la ecología, al medio ambiente y social, poder y garante del respeto a los derechos personales e íntimos.

El Estado se ha instalado y es el rector de la familia, de los seres humanos, de la vida social, promotor de oportunidades laborales, culturales con los apoyos ciudadanos, los tuyos, los nuestros, los comunitarios y personales para crear la fuerza social   con respeto, y si es posible con cariño fraternal, que no arrebata lo que pensamos porque es propio, y se comparte. Son situaciones de actitud, liderazgo y autoridad con reglamentación y leyes para el desarrollo  y convivencia; desafortunadamente nadie da lo que no se posee  y son tantos los protagonismos y desconfianzas que el proceso social educativo en que las generaciones adultas comparten con las generaciones infantiles, juveniles, la convivencia, de los  valores, usos y costumbres se dan, con el objetivo didáctico de aprender haciendo en las situaciones comunes, porque la instrucción y el acompañamiento, son guías formativas de un pueblo. Es esencial definir el arquetipo que se pretende educar como ciudadano.

 Resumiendo, la Educación es la instrucción y formación destinada a desarrollar la capacidad intelectual, moral, creativa y afectiva de las personas de acuerdo con la cultura y las normas de convivencia de la sociedad para superar los problemas de   la vida personal y comunitaria de las que se forma parte.

La escuela es el lugar diseñado para ocuparse de la educación en valores; cursos de educación de los educandos y su objetivo en esencia es el desarrollo integral de la personalidad humana en la construcción de la convivencia con respeto a los principios democráticos de aprecio y respeto a la naturaleza, nuestro hábitat.