Denuncian "Huachicoleo" en ZAPAZA

Juan José Ríos Ríos

El término “huachicoleo” ha sido empleado para denominar el robo de combustibles que ocurre en los ductos de la paraestatal PEMEX, mismo que bien se puede aplicar al fenómeno de mora y robo de agua que se hace del servicio que en Ciudad Guzmán otorga el OPD SAPAZA (Sistema de Agua Potable de Zapotlán), no de ahora, sino de muchos años atrás, lo que incide en una afectación económica y en los recursos de la institución y, de alguna manera repercute en los usuarios cumplidos.

            Porque no se puede llamar de otro modo al hecho de que el 40 por ciento del padrón de usuarios esté en calidad de morosos, y también en los que pagan tarde, siendo en su mayoría los mayores consumidores del agua que SAPAZA distribuye a través de sus redes a las cientos de colonias, barrios y zona centro de Ciudad Guzmán, según la información dada a este medio de comunicación por parte del funcionario de este organismo, Arturo Luisjuan Morales, mientras que el resto paga puntual aprovechando los descuentos que por ley se les reconoce u otorga.

            Por otra parte y según cifras dadas a conocer por el Director del SAPAZA, doctor Alfonso Delgado Briseño, durante su primera gestión al frente de este organismo, la falta del cumplimiento en el pago del servicio de agua potable, transmutada a dinero, era de más de 100 millones de pesos, de los cuales las personas que tienen bienes inmuebles, negocios o establecimientos comerciales en la zona centro, hace poco más de un año, adeudaban $44 millones 914 mil 414 pesos con 39 centavos, suma que a la fecha no se conoce sí ha aumentado o disminuido en razón de las medidas que, dijo el funcionario, estaban aplicando o por aplicar.

            Pero no solo en la zona centro de Ciudad Guzmán se tienen adeudos, existen colonias cuyos moradores también dejan de cumplir en el pago, ya no se diga oportuno, sino a destiempo, por el agua que reciben en sus hogares, destacando, por el monto del adeudo del tiempo al que se hace referencia y cuando el propio Delgado Briseño proporcionó la información oficial del estado de cuentas que guardaba SAPAZA, la colonia Constituyentes, sumando en ese entonces ocho millones 372 mil 984 pesos con 93 centavos, una quinta parte de lo que se debe en la zona considerada como centro de la ciudad.

            Del listado de colonias con adeudos por la falta de pago por el servicio de agua potable, le siguen a la de Constituyentes, en razón del monto de deuda, La Providencia, con tres millones 501 mil 140 pesos con 21 centavos, La Cantera o San José; con dos millones, 246 mil 331 pesos con 58 centavos, Solidaridad; con 2 millones 118 mil, 363 pesos con 88 centavos, la colonia Ejidal con 1 millón 731 mil 030 pesos 92 centavos, El Triángulo, con 1 millón 511 mil 062 pesos con 38 centavos, la colonia, Cruz Roja; 1 millón 273 mil 355 pesos con 91 centavos, Bugambilias; 1 millón 168 mil 967 pesos con 92 centavos, Azáleas; 1 millón 121 mil 746 pesos con 76 centavos, 16 de Septiembre; 1 millón 064 mil 637 pesos con 94 centavos, y Pintores, con un millón 059 mil 412 pesos y 95 centavos.

            El listado es enorme, pero para el caso sólo se consideró las deudas mayores al millón de pesos, pero que nos da una idea del problema y reto que tiene el SAPAZA para sanear sus finanzas y con ello mejorar su infraestructura y el servicio que otorga a la población en general. Todavía hay zonas en que el vital líquido se recibe por poco tiempo, hay lugares en que se quejan no solo por poca agua que reciben, también porque es portadora de residuos que induce a dudar de su potabilidad, se requiere que se sigan saneando las redes y el sistema de distribución para evitar fugas al subsuelo, las del drenaje y el tratamiento de las aguas residuales para que se reduzca la contaminación por esta causa en la laguna Zapotlán.

            También hay quienes utilizan el agua para llenar bidones que en sus vehículos particulares llevan a sus ranchos o parcelas para regar o alimentar ganado, son miles de litros que se obtienen de las redes de distribución, que no llegan a los hogares, tal vez de personas que sí pagan puntualmente por un servicio que no siempre reciben en cantidad y calidad referida, aquí cabe el término huchicoleo, pero de agua. Por otra parte, año con año los porcentajes de aumento repercuten en los puntuales, los que pagan a tiempo, aunque sea con descuentos legales, lo que va reduciendo el beneficio de quienes gozan esta prestación y sostienen, de hecho, el servicio y al personal de SAPAZA, pagan justos por pecadores.

            Como colofón, sería bueno conocer el estado que en sus finanzas guarda SAPAZA, información que debiera dar a conocer su titular, doctor Alfonso Delgado Briseño. Nos ponemos a sus apreciables órdenes, para informar sobre el tema.