Un
momento por favor
J.
Jesús Juárez Martín
Las
lluvias hacen milagros, dan vida a regiones y pueblos, las vidas de sus
pobladores cambian con la abundancia del vital líquido, adornan el paisaje en
sí espectacular, refresca los elementos, tierra, bosque, llanuras, ciudades y
hasta grandes depósitos naturales forman, las insondables lagunas, tan comunes
en otras latitudes, en nuestro estado se encuentra la Laguna de Chapala que
comparten los estados de Jalisco y Michoacán, la de mayor extensión nacional,
esencial para región y en especial, para la vida humana, de la ciudad de
Guadalajara, de ella se extrae el 60% del agua que consume, el río Santiago se
origina en ella, y pasa por la Barranca de Oblatos y Huentitán en las cercanías
de la capital jalisciense, le da el
toque de poesía porque refresca y limpia a la cordillera en su pedestal en la
búsqueda de su cuenca hacia San Blas Nayarit donde descarga su disminuido
caudal en el inquieto océano. Lo triste es que después de buen servicio, recibe
mal trato con descargas contaminadas de
residuos industriales y aguas negras de la grandiosa capital.
Las
lluvias del anterior mes colmaron el vaso lacustre y su nivel se elevó hasta
chocarse contra el malecón intentando cubrirlo, lo cual estuvo a punto de
realizarlo y los paseantes y vecinos del lugar disfrutan de una laguna llena,
saludable donde la pesca se fortalece en beneficio de pobladores, comerciantes,
prestadores de servicios turísticos, pescadores, comerciantes y comensales; el
malecón en Chapala, que comunica con el romántico faro disfruta del rítmico
oleaje en su estructura por sus costados y a cuatro gradas alcanzan las olas
que acompasadas al ritmo van y vienen
incansables bañando malecón y escaleras...
Simplemente
espectacular donde las aves revolotean, acercándose a las crestas de sus olas o
simplemente pareces volar en paralelo con las tranquilas aguas del espejo
lacustre donde más de doscientas garzas buscaban su alimento en una coreografía
cambiante y rítmica de blancos plumajes, el malecón elevado recientemente de su
nivel original, conduce al faro que guarda en su interior pinturas e
información histórica del lago, la región y la historia de la emblemática
laguna y esos datos nos ayudan a comprender que la vida se determina en
ocasiones por el medio ambiente o bien los humanos lo condicionan para
supervivencia continua, en una constante adaptación de la naturaleza con la
humanidad y la humanidad con la naturaleza. Donde quiera se conquista, porque
la adversidad pretende poner su dominio sobre la población y sin embargo los
grupos humanos son los que mejoran o perjudican los diversos lugares.
La
isla de los Alacranes y Mezcala en el interior de ella, son puntos de
referencia para sus dimensiones de veintiocho kilómetros de larga y de una
anchura en partes, de los ocho. Pues Mezcala, fue bastión insurgente en la
independencia, que nunca ocuparon los realistas, pese a los intentos de
capturarla por su lugar estratégico, defendida por sus habitantes y de la
rivera que entendieron cuál era su aportación a la lucha independiente.
Actualmente
es asediada por personas que pretenden colocar sus bastiones en ese lugar y
hacer un lugar turístico, sin embargo, con documentos, derechos y cariño a su
terruño los pobladores se niegan a la venta de sus terrenos.
Esta
región de la ciénaga. Imponente, bella, pródiga en hechos y personajes ocultos
por los avatares del tiempo, la incuria de escritores que enfrenta a los
historiadores a tomar diversos aspectos importantes para el rescate de la
historia de este lugar y en ocasiones contradictorios a una creencia popular.
Siempre la oralidad tradicional ha sufrido deformación y cambios que al
repetirse se considera verdadera y cuando aparecen los documentos, fehacientes
se debe ajustar la tradición a los juicios a la veracidad.
Para
nosotros por ahora nos queda el disfrute pleno de esta laguna: “novia romántica
como ninguna” como lo canta la canción bravía de Guadalajara de Pepe Guízar y
hacer votos porque se esclarezca quiénes son auténticos héroes en los momentos
aciagos de estos lugares y saber cómo sobrevivieron y conservaron sus
tradiciones, sus creencias, su tenencia de la tierra, su cultura es decir el
patrimonio cultural de los pueblos asentados dentro y a la rivera de la laguna
de Chapala. También es interesante
conocer la historia riquísima religiosa a los pies de la Virgen de Zapopan,
porque las conductas de hombres y mujeres son objeto de las creencias y se
pretenden vivir valores con las peticiones fervorosas de sus devotos que
confían en la intervención de Santa María.
Cuando
a mediados del siglo pasado, la laguna languidecía a tal punto que era posible
llegar a pie de Chapala hasta la Isla de los Alacranes, los devotos de ella
afirman que, con su visita y sus oraciones, volvieron las lluvias.
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