Juan José Ríos Ríos
El Volcán/Guzmán
Usuarios
del Mercado Municipal “Paulino Navarro” de Ciudad Guzmán, comprendiendo
locatarios, vendedores y clientes o consumidores de los productos que se
exhiben y ponen a la venta todos los días en este lugar público, corren riesgos
innecesarios y fáciles de eliminar con la sola voluntad de las partes a las que
les compete atender el problema, y que están representados en el ingreso
oriente del inmueble por los medidores e instalaciones de la Comisión Federal
de Electricidad.
Estos aparatos de medición del
consumo de la energía eléctrica que se utiliza por los comerciantes
establecidos y para dar iluminación al lugar, así como sus demás instalaciones
como es el cableado, están sin la debida protección, tanto para que no sean
dañados como para que no representen riegos para nadie, aunque más de alguien supondrá
que no los representan porque tienen una cubierta exterior aislante, los hay
que no la tienen y están al alcance de niños, adultos y cuando infortunado
pudiera tocarlos, sin querer, incluso.
Este riesgo lo hicieron “visible”
por las personas que utilizan el espacio cercano a estas instalaciones para
hacer sus ventas diarias de pan, camotes tatemados y los muy apreciados tamales
de olote y ceniza, personas que en su necesidad de ganarse la vida se instalan
a hacer su comercio a pocos centímetros de tocar los medidores y demás
instalaciones, mismas que son conscientes del riesgo que corren y que no les
queda más que confiar en que no sufrirán un lamentable accidente.
Cuestionadas acerca de este peligro,
dijeron que allí han estado por mucho tiempo, con el temor de sufrir un daño y
con la esperanza de que la nueva administración del mercado tome cartas en el
asunto, que vea por su seguridad y de las personas que acuden al Paulino
Navarro para hacer sus compras o consumos de los alimentos que allí se expenden,
lo que se puede solucionar protegiendo o aislando más los aparatos. Esta zona
incluso está siendo utilizada para colocar propaganda con motivo de la feria,
lo que de alguna forma encubre el riesgo y éste es para todos.
Es de esperarse que el Gobierno
Municipal de Zapotlán el Grande gire las instrucciones que sean necesarias para
que la CFE, que es su competencia, atienda el problema y lo resuelva, lo que no
requiere de mucha inversión, sí de voluntad de las partes. De esta manera se
pueden evitar accidentes que pueden ser también fatales, es mejor un grito a
tiempo que lamentarse no haber tomados las medidas correctivas en tiempo y
forma.
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