El
Depor-Tivo
Salvador
Medina
La
Selección Mexicana de futbol femenil logró el bicampeonato en los Juegos Centroamericanos
y del Caribe en Barranquilla 2018, venciendo en la final a la Selección de Costa
Rica por marcador de 3-1, con goles de Charlyn Corral, Kenti Robles y Katlyn
Johnson, un partido donde tuvieron que venir de abajo ya que empezaron
perdiendo, sin embargo, en el segundo tiempo en cuestión de 3 minutos dieron la
vuelta al marcador.
La
selección dirigida por Roberto Medina demostró una vez más que la pasión por
hacer lo que te gusta puede más que los reflectores o la atención pública. El
compromiso de las jugadoras por defender y sudar la camiseta nacional es de
suma admiración, un equipo nacional que nos enseñó como principal fortaleza la
unión y el trabajo en equipo, tomando en cuenta obviamente el gran talento
individual que cada una es capaz de sumar.
La
medalla de oro obtenida en los Juegos Centroamericanos y del Caribe, es sin
duda, el inicio de un histórico capitulo para el futbol femenil de nuestro
país, ya que en el próximo mes de octubre se estarán jugando su boleto a la
Copa del Mundo de Francia 2019, donde tendrán la gran oportunidad de dar un
golpe de autoridad para reclamar igualdad dentro la esfera futbolística del
país. Un golpe y un reclamo que ni siquiera debería ser necesario si se tuviera
un poco de empatía y sentido común.
Una
gran generación de futbolistas mexicanas, entre las que destacan, Charlyn
Corral, Kenti Robles, Mónica Ocampo, Nayeli Rangel, Cecilia Santiago, Cristina
Ferral, Katlyn Johnson, por mencionar algunas, están listas para dejar como
herencia un futbol igualitario con las mismas oportunidades para todos, tomando
en cuenta a las que vienen empujando detrás como Norma Palafox o Natalia Gómez
Junco recién fichada por el Málaga de España.
Ahora,
no deben de bajar los brazos en la lucha por ese boleto mundialista, la
CONCACAF solo otorga 3 pases para el Mundial, la misión será seguir con el
ritmo de juego que hasta ahora han tenido. Los frutos de la Liga MX Femenil han
sido positivos pues 12 jugadoras de la Selección juegan en el torneo doméstico,
a pesar del mundo de diferencias que existe entre la liga varonil y femenil en
cuestión de equidad y desarrollo.
Pese a
que la Liga MX Femenil es la máxima categoría de futbol profesional para
mujeres, futbolistas como Alicia Cervantes ex delantera del Atlas donde
marcaría 9 goles, le pagaban solo 1,500 pesos al mes, y al solicitar un
aumento, obtuvo como respuesta un rotundo “no” y tuvo que renunciar al sueño de
jugar al futbol. Y casos como este podemos estar seguros de que existen muchos.
Sueldos
con un tope salarial mensual muy bajo, no se pueden embarazar, y si eso sucede
se anula el contrato automáticamente con el equipo, ni tener pareja del mismo
sexo, son algunas de las reglas absurdas que tienen que aguantar a cambio de
seguir sus sueños. El deporte más popular del mundo no se puede seguir encerrando
a un solo género, sino dejaría de ser el “más popular”, la pelota sigue rodando
para todos lados y muchas veces el triunfo puede estar donde en un principio no
lo imaginábamos.
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