Juan
José Ríos Ríos
Ante
los problemas que se han venido sucediendo por la Autopista
Guadalajara/Manzanillo, sobre todo en el tramo comprendido Cuatro Caminos-Tonila,
debido a los accidentes, los más fatales, que se provocan en su gran mayoría
debido al tránsito de vehículos de carga de los denominados tráiler con dos
remolques arrastrando y sobre éstos pesados contenedores, cada vez más son los
usuarios de esta importante ramal carretero que se quejan por el costo del
peaje, del mal estado de algunos tramos y, sobre todo, por los accidentes que
ocurren causando víctimas mortales.
Esto ha orillado a que
organizaciones y civiles a que de manera constante procedan a tomar las casetas
y dejar libre tránsito a los usuarios, sin pagar el costo que se aplica según
el vehículo que se usa, cobro que aumentan de manera seguida y sobre todo en
períodos vacacionales o de descansos obligados oficiales, haciendo su agosto
los permisionarios de esta mal llamada autopista que han tardado años en
terminar su ampliación en el tramo que comprende de Zapotlán el Grande hasta
Tonila, cuando por el vecino estado de Colima el proyecto ya se terminó desde
hace tiempo.
Ciudadanos entrevistados sobre el
tema consideran que el cobro de peaje es indebido porque consideran que las
obras carreteras son costeadas con dinero público, producto del cobro de
impuestos y de los diferentes ingresos que la federación obtiene al disponer de
los bienes y recursos naturales que se explotan en el país, como el petróleo, y
que indebidamente se “concesionan” a empresas privadas, cuando en los mismos
tramos carreteros se exhiben espectaculares en donde se indica que el Gobierno
invierte recursos en su mantenimiento.
De igual forma lamentan que ni la
federación ni el Gobierno de Jalisco destine los recursos suficientes para
mantener en condiciones de un mejor uso y tránsito las carreteras que están
libres de cobros de peaje, como el ramal Vía Corta a Colima, que si bien existe
una conexión a la autopista a la altura de la cabecera Municipal Tonila, el
trayecto Ciudad Guzmán, Atequique y hasta Tonila está en muy malas condiciones,
muy mal parchada y empeorada con las modificaciones que se le han hecho con
motivo de las obras, que no acaban, para la construcción de los dos carriles
que faltan para unirlos con Colima, por la ausencia del peralte obligado en
algunas curvas.
Los conductores de las carreteras
libres que debe mantener el Gobierno del estado, aparte del tramo ya mencionado
líneas arriba, como lo son Ciudad Guzmán-El Grullo, Ciudad Guzmán-Huscalapa-Zapotiltic
y sus conexiones hacia Tamazula, Tecalitlán-Pihuamo, cuestionan los pocos
recursos que se destinan a su mantenimiento y también que no se supervisen las
obras, porque más se tarda en hacer el tapado de hoyos o baches en que éstos se
vuelven a abrir, por lo que casi todo el año y más en temporadas de lluvias
están muy destruidas y el mejor ejemplo está en el tramo Ciudad Guzmán-El
Grullo.
“Si nuestros impuestos son
carreteras, como el mismo Gobierno nos dice, porqué nos cobran por su uso, por
qué no mantienen en buen estado las carreteras libres de cobros”, fueron los
comentarios recibidos, tanto de personas que viven en Municipios del vecino
estado de Colima y que de manera frecuente hacen uso de la autopista para venir
a Jalisco, como de Jaliscienses o personas que radican en los diferentes
Municipios de la Región sur que van a Colima capital o hacia sus costas para
disfrutar las playas, considerando que se paga más de peaje que el gasto por
consumo de gasolina al transitar por la libre, que no está libre de riesgo por
el estado que guarda y porque de manera constante es usada como vía de escape
cuando se cierra la autopista por algún accidente carretero provocado
generalmente por traileros.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario