Juan
José Ríos Ríos
El Volcán/Guzmán
Dedicar
40 años de su vida, poniéndola en riesgo y al servicio de los demás, es parte
del servicio que hizo José Navia González, mejor conocido en la sociedad
guzmanense como el “Hermano Navia”, y quien recientemente le fue reconocida su
entrega a la sociedad recibió la Presea al Mérito Ciudadano que cada día quince
de agosto, anualmente, hace el Gobierno Municipal en turno en Zapotlán el
Grande.
Persona, sencilla, humilde y que
ahora para transitar en la vía pública se sirve de un aparato locomotor al
estar postrado en una silla por falta de movilidad propia, a través de sus
extremidades inferiores, mismas que le permitieron su fama de buen escalador y
rescatista de personas perdidas o en desgracia en las cumbres del Nevado de
Colima, y con las que ahora ya no puede transitar en la vía pública.
Y aunque a su juicio todo lo que le
ha sucedido y la entrega de la Presea al Mérito Ciudadano que recibió, todo
viene de arriba, de nuestra parte como medio informativo quisimos dejar para la
posteridad parte de los logros que hizo cuando podía valerse de sí mismo, en
una breve entrevista que se le realizó previo al acto de recepción del
reconocimiento que se le hizo en el patio central del Palacio Municipal de
Ciudad Guzmán.
“Duré como 40 años rescatando
personas, aparte de eso Dios me dio licencia de conquistar todos los volcanes
de la República Mexicana, representando a Zapotlán principalmente. En 1963 me
tocó ser guía oficial de la Federación Mexicana, y pase un susto, por una
parte, al ser responsable de todos los integrantes de la Confraternidad que
viene cada año, todos los alpinistas, bien preparadísimos, yo me sentía
chiquito frente a ellos”.
Agregó que le tocó llevarlos, como
guía responsable, llevarlos al Nevado, para de allí bajar para cruzar las dos
barrancas tremendas, según sus palabras, de La Muerta y la de Beltrán, para
llegar al Volcán de Fuego de Colima, conquistándolo. “Me tocó traerlos sanos y
salvos a Ciudad Guzmán, así gracias a Dios que todo salió bien”, comentó,
actividad que realizó por espacio de 40 años.
Se dijo feliz por lo hecho, que le
daba gracias a Dios y a todas las personas que han hecho labor en favor de su
persona, que mientras Dios lo dejara sobre la tierra no los olvidaría en sus
oraciones, palabras dichas con la sencillez y humildad que le caracteriza a
Fray Navia o Hermano Navia, como coloquialmente se le denomina en Ciudad
Guzmán.
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