Milton Iván Peralta
El Volcán/Guzmán
Tras el dictamen de la Comisión de Vigilancia del Congreso del Estado, donde
aprobó el dictamen que establece un cargo fiscal de once millones 12 mil 59
pesos y 79 centavos al ayuntamiento de Zapotlán el Grande, correspondiente al
año 2015, y particularmente a los tres primeros meses de la actual
administración municipal, sin que a la fecha se haya enviado información
aclaratoria a lo observado por la Auditoría Superior del Estado.
Ante esto, la regidora del PAN, Claudia Murguía, en torno al tema, en el cual
comenta que esto se debe a la mala administración del presidente municipal,
Alberto Esquer, y del tesorero, Agustín de la Fuente por lo cual pidió su
renuncia.
“Los once millones que hacen falta, se adjudican directamente al presidente
municipal, Alberto Esquer y a su tesorero, Agustín de la Fuente, ellos fueron
omisos al responder, y aclarar la información, en el que se le solicitó en
escritos”, dijo la regidora.
Claudia comenta que queda claramente constatada, para la auditoría y la
comisión de vigilancia avala, “por eso se finca un cargo, pero debemos decir
que este proceso no culmina, el proceso debe ser aprobado por la asamblea, o
por el pleno del congreso, como es sabido esos procesos suelen durar dos o tres
años”.
Explicó que hay elementos suficientes de que “once millones de pesos
correspondiente al dinero de zapotlenses, no comprobados a cabalidad”. Comenta
que entre las cosas que no “cuadran”, son pólizas de cheques, a nombre de una
empresa, por casi cincuenta mil pesos, y otro de poco más de veinte mil pesos.
Además de algunas contrataciones que los cheques no coinciden con la emisión de
la factura.
“No se demostró que de la colonia Camichines se haya entregado las áreas verdes
de donación, como corresponde, ese monto corresponde, cosa que me parece
extraña, porque si recuerdan las últimas ventas de terrenos que hizo el
cabildo, fue por la venta de terrenos, el presidente comentó que como
administraciones pasadas no exigían las áreas de donación, esas áreas eran
imposibles de rescatar, casa que aquí se omite, ese es el cargo que se finca
mayormente”, dijo Claudia.
“Ya se acreditó que existe un daño al erario público, aunado que está corriendo
la revisión de la cuenta pública 2016, de lo cual ya se hizo del conocimiento
que hay alrededor de $36 millones de pesos, que tampoco han sido justificados”,
dice Claudia que es un tema muy preocupante, y que hay de dos: “el dinero no se
justificó, o hay una total falta de capacidad, por parte de la tesorería y del
alcalde, para llenar las exigencias de la auditoría, y que es incongruente con
el discurso, tratando de encumbrar a Zapotlán como un municipio transparente,
queda claro que no es así”.
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