La cuaresma un camino hacia la vida

Noé Guadalupe Rodríguez

Estamos en plena cuaresma, pero ¿saben lo que este tiempo significa? Este es un tiempo de reflexión, para pensar acerca de nuestra conducta y de pedir perdón a Dios por nuestros pecados; por las veces en las que hemos ofendido a él o a nuestros hermanos. En este tiempo de la cuaresma nos preparamos para celebrar tres días muy importantes para nuestra Iglesia; la Pasión, la Muerte, Resurrección y glorificación de Jesús, el hijo de Dios que dio la vida por nuestra salvación. La Cuaresma inicia con el Miércoles de Ceniza, y dura cuarenta días, por ese motivo se le nombra cuaresma. Ahora en este articulo los invitamos descubrir todo lo que Jesús hizo por nosotros, por nuestra salvación y como nos   dice   San   Pedro, Jesús pasó haciendo el bien, y ustedes lo entregaron a los malvados para que lo crucificaran, pero Dios lo resucitó.

Te sugiero leer lo que nos dice el evangelio de san Mateo 21, 6-10. Que nos narra lo que sucedió ese día, en que Jesús es aclamado por el pueblo y que a lo llamamos Domingo de Ramos, día en que comienza la Semana Santa. En el Jueves Santo, se realizan diversas celebraciones a lo largo del día, a las doce se realiza la misal Crismal, es la celebración en la que, presidida por el Señor Obispo y concelebrada con los presbíteros de la diócesis, se consagra el Santo Crisma y bendice los restantes óleos (aceites), de los catecúmenos y de los enfermos, y que ha de ser tenida como una de las principales manifestaciones de la plenitud sacerdotal del obispo y como un signo de la unión estrecha de los presbíteros con él, en esta celebración todos los Presbíteros renuevan su juramento y su servicio a Dios a través de su prójimo. Con el Crisma consagrado por el obispo son ungidos los nuevos bautizados y son signados los que reciben la confirmación. Con el óleo de los catecúmenos se preparan y disponen para el bautismo los mismos catecúmenos. Con el óleo de los enfermos, éstos son aliviados en sus enfermedades lo que común mente llamamos; a don Ramon le pudieron los Santos Oleos.

El Óleo de los catecúmenos: se extiende el efecto de los exorcismos, se habla de fortaleza en la lucha de la vida cristiana, a la que los catecúmenos se preparan al recibir el bautismo. La oración de bendición dice “Bendice este óleo y concede tu fortaleza a los catecúmenos que han de ser ungidos con él, para que al aumentar en ellos el conocimiento de las realidades divinas y la valentía en el combate de la fe, vivan más hondamente el evangelio de Cristo, y emprendan animosos la tarea cristiana.

El Óleo de los enfermos: confiere a los enfermos, como atestigua la carta de Santiago (5, 14-16) el remedio de la enfermedad, para que sean aliviados físicamente y les sea restituida la salud. En la bendición de la Misa Crismal se dice: Bendice este óleo para que cuantos sean ungidos con él sientan en cuerpo y alma tu divina protección y experimenten alivio en sus enfermedades y dolores.

El Crisma es el óleo consagrado que tiene mayor riqueza de significados y que lo encontramos en varias celebraciones y sacramentos. Es materia esencial de la confirmación, escrito complementario explicativo en el bautismo. Se emplea en las ordenaciones de obispos, en la cabeza, y de los presbíteros, en las palmas de las manos. También se usa en la dedicación y consagración de una iglesia y de un altar. La oración lo expresa así: Derrama sobre nuestros hermanos, cuando sean ungidos con este crisma, la abundancia de los dones del Espíritu Santo, y que los lugares y objetos consagrados por este óleo sean para tu pueblo motivo de santificación. La característica común, al bendecir y consagrar el óleo, es la de ser medicina, remedio y aliento para nuestros cuerpos, paz y alegría para nuestros rostros, y renovación, conversión y signo para nuestro espíritu.

El evangelio de san Juan 13,2-10, nos narra que Jesús el hijo de Dios, manifiesta su humildad y su espíritu de servicio y les lava los pies a sus Apóstoles, esta es la primera parte del Jueves Santo, porque este mismo día celebramos la ultima cena de Jesús con sus apóstoles y esta es la segunda parte del Jueves Santo, este día se realiza la primera eucaristía, la primera comunión de los Apóstoles, puedes leer lo que sucedió en este día en el evangelio de San Marcos 14, 12-25.

El Viernes Santo celebramos la pasión y muerte de Jesús. Aquí escucharemos que Jesús sin ser culpable de ninguna falta, es acusado por los poderosos, condenado a muerte y traicionado por su amigo Judas Iscariote, te recomiendo leer y reflexionar, el evangelio de San Lucas 23,13-24 el cual explica el Vía Crusis de Jesús.

El Sábado Santo es un día de grana espera, pues en la media noche se celebra la Vigilia Pascual, aquí escucharemos que Jesús estuvo muerto en el sepulcro, pero resucitó al tercer día, este día celebramos La resurrección de Jesús, en una solemne misa en la que se realiza la bendición del fuego, el cual se utilizara en cada eucaristía, en cada sacramento, recordándonos que Jesús es la luz del mundo, Jesús, el camino la verdad y la vida, nos recuerda que Jesús es el alfa y el omega el principio. Entre los afanes de cada día hay siempre una esperanza de éxito. La paz llegara quien no cesa de buscarla. El premio que se alcanza lucha y coraje, sin desanimarse la Paz es fruto de la justicia, que hace del mundo una aldea feliz, donde todos son amigos, porque un anuncio de oriente a occidente, de norte a sur de cada país, transpone fronteras y divisiones, Cristo ha resucitado renació la vida donde quiera que estés o por donde quiera que vayas, renace el amor y la esperanza, pues sí Jesús resucita otro mañana pueblo querido tú vas a ver, un canto me nace del corazón y llena de alegría en todo mi pueblo, la muerte no es la última palabra tampoco esta historia de sufrimiento, Jesús resucita y hoy su misión nos deja, Jesús a resucitado podemos todos ya ser hermanos, hay que unir nuestras manos y nunca más separarnos porque en la comunión esta Cristo más vivo que nunca, te invito a leer el evangelio de san Lucas 23, 26-46.

Así amanece el Domingo, el día de la Resurrección, como hemos escuchado la cuaresma es un tiempo muy bonito, en cual recordamos aspectos llenos de amor, Jesús el hijo de Dios murió por nosotros, pero su padre Dios quiso que él venciera la muerte, eso es lo que celebramos en la pascua de Jesús el paso de la muerte a la vida, por esa razón Nuestro Padre celestial lo resucita, después de ser crucificado y de haber estado en el sepulcro tres días, se hace presente a sus discípulos y le pide que continúen su misión.

Jesús no fue vencido, ni derrotado en la cruz, como creían los fariseos y los maestros de la Ley, Jesús resucita y llena de confianza y de una alegría a sus Apóstoles, y los anima con la fuerza del Espíritu Santo quién los acompañara a todas partes.