Samuel Gómez Patiño
De músico, poeta y locos todos
tenemos un poco dice un viejo refrán, y en esta ocasión se darán cuenta que la
música la traigo muy adentro, de poeta ni a versos llego, pero de loco hasta yo
me espanto.
Estaba pensando en esta columna y
de pronto empecé a cavilar sobre el amor, ¿Qué significado tiene?, pues bien,
para que iniciar una discusión si los músicos y poetas ya lo han escrito. Te
invito a recordar tus mejores emociones con las siguientes expresiones de los
profesionales del amor.
“De
que me gustas, es verdad, de que te quiero, es verdad, más si me quieres
aceptar no necesitas decir sí. Tan solo bésame y sabrás que como un loco estoy
de ti enamorado”, de
Juan Gabriel para declararse a ese amor inesperado.
“Hoy
amanece y el sol tiene un raro esplendor, escucho al viento pasar, veo la luna
brillar. Al mismo cielo lo miro con otro color, nada es nuevo sólo que te
conocí”, Víctor
Iturbe el “pirulí” nos enseñaba sobre la felicidad del amor.
“Cuanto
daría por gritarles nuestro amor, decirles que al cerrar la puerta nos amamos
sin control. Que despertamos abrazados, con ganas de seguir amándonos, pero es
que en realidad no aceptan nuestro amor”, Ana Gabriel y el amor prohibido.
“Si
yo muero primero, es tu promesa, sobre mi cadáver dejar caer todo el llanto que
brote de tu tristeza y que todos se enteren de tu querer. Si tu mueres primero,
yo te prometo, escribiré la historia de nuestro amor, con toda el alma llena de
sentimiento: la escribiré con sangre, con tinta sangre del corazón”, Julio Jaramillo al amor que la
muerte no puede separar.
“No
tengo dinero ni nada que dar, lo único que tengo es amor para amar, si así tú
me quieres te puedo querer, pero si no pues ni modo que hacer”, Juan Gabriel y las primeras
preocupaciones.
“Adoro
la forma que sonríes, el modo en que a veces me riñes, adoro la seda de tus
manos, los besos que nos damos, los adoro vida mía”, del maestro Armando Manzanero, que
además nos emociona con: “Somos novios
pues los dos sentimos mutuo amor profundo y con eso ya ganamos lo más grande de
este mundo”.
“Sin
un amor, la vida no se llama vida, sin un amor, le falta fuerza al corazón, sin
un amor el alma muere derrotada”, o “reloj detén tu camino porque mi vida se
apaga, ella es la estrella que alumbra mi ser, yo sin su amor no soy nada”, con Los Panchos endulzando nuestras
vidas.
“Y
cada tarde al volver su esposo cansado del trabajo la mira de reojo, no dice
nada porque lo sabe todo. Sabe que es feliz, así de cualquier modo, porque él
es quien le escribe versos. El, su amante, su amor secreto, y ella no sabe
nada, mira a su marido y luego calla”,
Cecilia con su Ramito de violetas y el amor incondicional.
“Ven
conmigo, cierra los ojos y en silencio, sin palabras, yo mil cosas te diré.
Acompáñame, que tu amor es mi canción”
o “Como han pasado los años, las vueltas
que dio la vida, nuestro amor siguió creciendo, y con él, nos fue envolviendo,
habrán pasado los años, pero el tiempo no ha podido hacer que pase lo nuestro”,
Rocío Durcal cantando al tiempo y al amor.
“Que
triste luce todo sin ti, los mares de las playas se van, se tiñen los colores
de gris, hoy todo es soledad”,
José José y la pérdida de un amor.
“Me
canse de rogarle, con el llanto en mis ojos alce mi copa y brinde por ella, no
podía despreciarme era el último brindis de un bohemio por una reina”, José Alfredo Jiménez con un amor
no correspondido.
“Y,
¿Cómo es él? ¿En qué lugar se enamoró de ti?, ¿de dónde es? ¿A que dedica el
tiempo libre?, pregúntale, porque ha robado un trozo de mi vida, es un ladrón
que me ha robado todo”,
José Luis Perales y el amor filial.
“Mi
cachito, mi pedazo de angelito, mi cachito, mi pedazo de huracán, aunque no
metas un gol, o no mandes un jonrón, para mí siempre serás un gran campeón”, Patty Ibarra y el amor más
desinteresado.
No se cantar y hace tiempo que no
toco mi acordeón, pero llevo la música por dentro y el amor en el corazón, y
cada poeta y compositor nos embarga la vida con sus sentimientos. El amor no es
de un día, es de toda tú vida, nadie da lo que no tiene, llena tu vida de amor,
al fin y al cabo no cuesta, pero lo cura todo.
Me gustaría leer tú opinión, puedes
escribirme al correo samuelgomez@uabc.edu.mx o en Facebook: Samuel Gómez Patiño
*Vicepresidente Educativo del Club Toastmasters
Ejecutivos de Tijuana
Licenciado y Maestro en Administración de Empresas
Catedrático en la Facultad de Contaduría y
Administración, en Tijuana
Universidad Autónoma de Baja California
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